[EDITORIAL] Un precario sistema de salud

Continúa acrecentándose la crisis humanitaria que desde meses atrás han venido enfrentando los pacientes en el actual sistema de salud en Colombia, la situación que enfrentan es crítica; indiscutiblemente nos encontramos ante un hecho marcado por una insuficiencia financiera y operativa que afecta directamente el acceso y la calidad de los servicios de salud. Es preocupante la forma como se está enfrentando esta situación, teniendo en cuenta la urgencia que se le dé solución a tan álgido problema, especialmente en lo atinente a la entrega de los medicamentos, los cuales según los afectados han escaseado en los últimos meses por lo que muchos pacientes afiliados al sistema de salud no están recibiendo los remedios oportunamente. Teniendo en cuenta esta grave problemática hay que reconocer la grave crisis humanitaria que están viviendo millones de pacientes afiliados al sistema de salud en Colombia. La situación que enfrentan los pacientes es crítica, estamos ante una crisis marcada por una insuficiencia financiera y operativa que afecta directamente el acceso y la calidad de los servicios de salud, es aterradora la forma como se está enfrentando esta situación, según conceptos emitidos por miles de afiliados al sistema. Es indiscutible que los principales afectados son los pacientes, quienes a pesar de ser los más importantes en la cadena del sistema de salud, son los que están sufriendo las consecuencias de la actual crisis, por lo que no se quedarán callados frente a esta situación y continuará hasta el último día de la presente administración exigiendo soluciones reales para que se garanticen los derechos fundamentales de los colombianos, especialmente en lo concerniente a que el sistema de salud de Colombia sea respetado. Con relación a los retos del sistema de salud es evidente la alarmante escasez y desabastecimiento de medicamentos, que se viene agravando cada día que pasa. Es que esta crisis intensificó las barreras de acceso a medicamentos fundamentales para tratar enfermedades catastróficas. Es menester agregar que a pesar de la urgencia en este tópico, el Ministerio de Salud y el Invima, como entes responsables de la política farmacéutica, no han desplegado las acciones necesarias para superar esta problemática, por lo que se hace necesario que se adelanten las investigaciones correspondientes para así determinar responsabilidades y exigir soluciones inmediatas que prioricen el bienestar de los pacientes, afiliados a las distintas entidades que hacen parte del sistema de salud en Colombia. Según recientes encuestas, seis de cada diez colombianos desaprueban la forma como se están enfrentando los problemas de la salud y piensan que la calidad sigue empeorando, de acuerdo a este sondeo la opinión pública le pasa una cuenta de cobro al Gobierno por una crisis que no ha hecho más que profundizarse con el correr de los años. A propósito, en nuestra sala de redacción es permanente la recepción de quejas de afiliados molestos porque en su E.P.S. no les atienden las llamadas telefónicas solicitando una consulta médica, tal como está establecido ahora. Las denuncias formuladas en estos últimos días por un grupo de lectores de LA LIBERTAD, nos confirman la necesidad de seguir debatiendo a profundidad el delicado tema de la salud.