Tres hombres armados atacaron a una patrulla en Simití, al sur de Bolívar; las autoridades anunciaron un Consejo de Seguridad Extraordinario para frenar la ola de violencia contra la fuerza pública.
El municipio de Simití, ubicado en el sur de Bolívar, fue escenario de un nuevo acto de violencia que enluta a la fuerza pública. En la tarde del miércoles, tres hombres armados con armas de largo alcance abrieron fuego contra una patrulla de la estación de Policía local, dejando como saldo trágico dos policías muertos y uno más herido. El hecho, que ocurrió en las afueras de la estación, es el cuarto ataque contra la Policía registrado en el departamento en menos de una semana, evidenciando una alarmante escalada de violencia.
Las víctimas mortales fueron identificadas como el patrullero Edwin Agustín Feria Mercado y la patrullera Belén Karina Durán Ortiz, quienes perdieron la vida mientras cumplían con su deber. El uniformado herido fue trasladado a un centro asistencial cercano, donde recibe atención médica. La institución aún no ha revelado su identidad.
Según la versión oficial entregada por el secretario de Seguridad de Bolívar, Manuel Berrío Scaff, los atacantes habrían llegado por la ciénaga en una embarcación y abrieron fuego contra los agentes justo cuando estos regresaban de una ronda por el municipio. “La hipótesis preliminar es que tres sujetos fuertemente armados ingresaron por la ciénaga en bote y dispararon contra una patrulla que después de hacer rondas por el municipio regresaba a la estación de Policía”, afirmó el funcionario.
Durante el ataque, el centinela de la estación reaccionó e intentó repeler la ofensiva, pero fue impactado mortalmente en medio del enfrentamiento. La rápida acción de los agresores y su posterior fuga han generado preocupación entre las autoridades y la ciudadanía, que exigen mayor presencia estatal en esta zona históricamente afectada por el conflicto armado y la criminalidad.
“Por instrucción del señor gobernador y en coordinación con el señor alcalde municipal, se realizará de manera urgente un Consejo de Seguridad Extraordinario para definir la estrategia necesaria para que este tipo de hechos no se repitan”, indicó Berrío Scaff.
El ataque en Simití se suma a una serie de hechos violentos recientes contra la Policía Nacional en Bolívar. Durante la Semana Santa, dos uniformados fueron asesinados en el corregimiento de Pasacaballos, en Cartagena. Estos ataques, ocurridos con pocos días de diferencia, han encendido las alarmas en la región y han obligado a las autoridades a replantear las estrategias de seguridad.
En medio del dolor por la pérdida de sus compañeros, los uniformados de la Policía de Bolívar recibieron recientemente 100 chalecos antibalas como parte de las medidas para reforzar su seguridad ante el creciente riesgo que enfrentan en el ejercicio de sus funciones. Sin embargo, para muchos, estas acciones resultan insuficientes frente a la amenaza latente de grupos armados ilegales que aún operan en la región.
Organismos de seguridad e inteligencia ya adelantan investigaciones para identificar a los responsables del atentado, sin que hasta ahora se haya confirmado si se trata de estructuras criminales específicas como disidencias de las FARC, ELN o bandas dedicadas al narcotráfico que suelen operar en el sur de Bolívar.
El país sigue registrando altos niveles de violencia contra la fuerza pública, particularmente en zonas rurales y de difícil acceso, donde la presencia estatal es intermitente y la respuesta institucional, en muchas ocasiones, insuficiente. Este nuevo ataque en Simití representa no solo una tragedia para los familiares de los uniformados asesinados, sino también un duro golpe a la moral institucional y a la sensación de seguridad de los habitantes del municipio.
Los próximos días serán clave para establecer medidas concretas que garanticen la protección de los policías en terreno, así como para esclarecer los responsables del atentado. Mientras tanto, las comunidades del sur de Bolívar continúan a la expectativa, entre el temor y la esperanza de que hechos como este no se repitan.
Y.A.