La capital del Atlántico dio la bienvenida este viernes al crucero AmaMagdalena, una embarcación de lujo que marca un nuevo capítulo para el turismo en la región y la recuperación de la navegabilidad del río Magdalena. Con capacidad para 60 pasajeros y 30 cabinas, este crucero está diseñado especialmente para turistas extranjeros que buscan experiencias únicas ligadas a la riqueza cultural y natural de Colombia.
El arribo de esta embarcación representa un hito histórico. Según Clemente Fajardo, asesor de comunicaciones y estrategia de AmaWaterways, “la llegada del AmaMagdalena revive el turismo fluvial, desaparecido desde 1962, cuando el buque David Arango sufrió un incendio en el puerto de Magangué. Desde entonces, no se realizaban recorridos turísticos de pasajeros por el río Magdalena”.
La ruta del AmaMagdalena inicia en Cartagena y tiene como punto principal de llegada el municipio de Mompox, con una travesía de dos noches y tres días. A lo largo del trayecto, el crucero visita diversos municipios como Mahates, San Basilio de Palenque, Calamar, Santa Bárbara de Pinto, la Ciénaga de Magangué y los pueblos palafitos de Nueva Venecia, hasta arribar a Barranquilla.
Durante el recorrido de siete días, los turistas disfrutan de una experiencia exclusiva que combina gastronomía de alto nivel, actividades culturales y contacto directo con la biodiversidad del país. “Estamos llevando turismo a lugares que por años estuvieron fuera del radar turístico. Hoy, estas comunidades se benefician con la llegada de visitantes, a través de la venta de artesanías, productos locales y presentaciones folclóricas”, explicó Fajardo.
El impacto económico y social ya es visible en las poblaciones ribereñas, que encuentran en el turismo una nueva oportunidad de desarrollo. Además, desde la embarcación, los visitantes pueden apreciar la riqueza escénica del Magdalena y conocer de primera mano el valor histórico y cultural de las comunidades del Caribe colombiano.
El crucero zarpa nuevamente al día siguiente con un nuevo grupo de pasajeros, realizando el trayecto en sentido inverso hasta Cartagena. Se anunció también que a partir del mes de agosto comenzará a operar un segundo crucero, Ama Melodía, con frecuencia semanal desde Cartagena y Barranquilla, consolidando así esta nueva apuesta por el turismo fluvial de alto nivel en Colombia.