El mandatario asegura que desde la Duma departamental se conspira contra su gobierno y se bloquean recursos clave que afectan directamente a la ciudadanía.
En un fuerte pronunciamiento a través de sus redes sociales, el gobernador del Magdalena, Rafael Martínez, reveló lo que calificó como un complot dentro de la Asamblea Departamental, que no solo estaría dirigido contra su administración, sino también contra los intereses de la ciudadanía.
“Ha quedado al descubierto el complot al interior de la Asamblea, no sólo son opositores al gobierno sino que son enemigos del pueblo”, afirmó Martínez, quien señaló que se trata de una confesión pública de quienes han estado detrás de la negación del superávit, es decir, de los recursos adicionales que el gobierno departamental busca invertir en programas sociales y proyectos estratégicos.
De acuerdo con el gobernador, la decisión de la Duma de hundir la aprobación del superávit representa un golpe directo a las esperanzas de miles de magdalenenses, al anteponer intereses políticos y personales por encima del bienestar colectivo. “Nos buscan asfixiar, pero del pueblo y la justicia viene el aire para vencer”, concluyó el mandatario en su mensaje, que ha generado diversas reacciones en la opinión pública y en el escenario político regional.
Martínez no ha dudado en calificar esta maniobra como una traición a los intereses del pueblo, dejando entrever que podría haber motivaciones ocultas tras esta postura de la mayoría en la Asamblea. La situación revive tensiones entre el ejecutivo departamental y el órgano colegiado, que desde hace meses mantiene una relación conflictiva con el actual gobierno.
El llamado del gobernador invita a la ciudadanía a reflexionar sobre quiénes están frenando los avances del departamento y plantea la necesidad de una movilización social y política para contrarrestar lo que él considera un acto de asfixia institucional.
Y.A.