Gobierno diseña estrategias para evitar sanciones económicas y comerciales en caso de una decisión adversa.
La canciller Laura Sarabia confirmó que Colombia ya se prepara ante un eventual escenario de descertificación por parte de Estados Unidos en la lucha contra las drogas, una medida que podría traer serias consecuencias para el país en términos económicos y comerciales.
“Nos preparamos obviamente para un escenario de certificación, que es a lo que le apostamos con cada una de nuestras acciones, pero también nos preparamos para un escenario distinto, en el cual no quisiera ahondar porque sigue siendo un escenario hipotético”, declaró Sarabia.
El Gobierno ha trabajado en la consolidación de un plan estructurado para reducir los cultivos ilícitos y demostrar su compromiso en la lucha contra el narcotráfico. Sarabia insistió en que esperan que los esfuerzos reflejados en la erradicación de cultivos y el combate a las estructuras criminales permitan obtener una evaluación positiva por parte de EE. UU.
Sin embargo, la posibilidad de una descertificación podría generar repercusiones como el congelamiento de la ayuda económica estadounidense, restricciones en el comercio bilateral y limitaciones en el acceso a préstamos de organismos internacionales como el Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional (FMI).
El más reciente informe del Departamento de Estado de EE. UU. advirtió que Colombia debía intensificar sus esfuerzos en la erradicación de cultivos de coca, que alcanzaron cifras históricas de más de 250.000 hectáreas, según datos de la ONU. Aunque reconocieron avances, enfatizaron que no han sido suficientes.
El tema de la certificación se ha convertido en un punto de tensión en las relaciones entre Colombia y Estados Unidos, especialmente con el eventual regreso de Donald Trump a la Casa Blanca. Históricamente, la descertificación ha sido utilizada como una herramienta de presión para exigir resultados más contundentes en la erradicación de cultivos y la interdicción de drogas.
Posibles aranceles adicionales
Además de este escenario, el Gobierno también manifestó su preocupación por un posible aumento de aranceles por parte de Estados Unidos. El vicecanciller Daniel Ávila aseguró que la Cancillería trabaja en la diversificación de mercados para reducir la dependencia del comercio con ese país.
“Algo que estamos haciendo desde Cancillería de manera diaria y constante es la diversificación de mercados. Y por eso, pese a que Estados Unidos es un socio estratégico y principal con el cual seguimos trabajando, también nosotros seguimos explorando oportunidades en Asia, Europa y África”, señaló Ávila.
Y.A.