Presidente de Panamá descarta presencia de bases militares extranjeras en su país

El presidente de Panamá, José Raúl Mulino, reafirmó este jueves que su país no permitirá la instalación de bases militares extranjeras, incluyendo las de Estados Unidos, en cumplimiento del Tratado de Neutralidad que rige el Canal de Panamá.

En su conferencia de prensa semanal, Mulino enfatizó que “no habrá bases militares de ninguna potencia en Panamá, sea Estados Unidos o cualquier otro país. El Tratado de Neutralidad se respeta y solo nuestra República tiene derecho a mantener presencia militar en su territorio”.

Las declaraciones del mandatario surgen como respuesta a informes de la prensa local que sugerían la existencia de una carta del gobierno estadounidense con propuestas para administrar el Canal o establecer presencia militar en Panamá, afirmaciones que Mulino negó rotundamente.

Desde la eliminación de su Ejército en 1990, tras la invasión estadounidense de 1989, Panamá no alberga bases militares extranjeras, siguiendo los lineamientos de los Tratados Torrijos-Carter de 1977. Dichos acuerdos permitieron la transferencia del Canal de Panamá a manos panameñas el 31 de diciembre de 1999, consolidando su soberanía sobre la estratégica vía interoceánica.

Actualmente, la seguridad del país está en manos de organismos especializados como el Servicio Nacional Aeronaval (Senan), el Servicio Nacional de Fronteras (Senafront) y la Policía Nacional. No obstante, Panamá mantiene una estrecha cooperación en materia de seguridad con Estados Unidos, principalmente en la lucha contra el narcotráfico y la migración irregular.

“El país luchó por el desmantelamiento de las bases militares estadounidenses en nuestro territorio. No podemos ir en contra de esa historia”, afirmó Mulino, destacando que la colaboración entre ambas naciones se mantiene en asuntos específicos, pero sin comprometer la soberanía panameña.

Por su parte, el Pentágono desmintió el pasado 14 de marzo que exista un plan para modificar su presencia militar en Panamá. Sin embargo, confirmó que ambas naciones continúan trabajando en maniobras conjuntas dentro del marco de los acuerdos bilaterales de seguridad.

Estas aclaraciones surgieron tras una publicación de la cadena NBC News, que aseguraba que el expresidente Donald Trump había solicitado evaluar opciones para recuperar el control del Canal de Panamá, incluyendo el posible envío de tropas.

La postura del gobierno panameño deja claro que el país seguirá comprometido con la defensa de su soberanía y el cumplimiento de los tratados internacionales que garantizan la neutralidad del Canal, uno de los puntos estratégicos más importantes del comercio global.