El malecón de Santo Domingo se convirtió en el epicentro de la cultura y la alegría este domingo con la celebración del Desfile Nacional del Carnaval, la fiesta popular más importante de la República Dominicana. Frente a las aguas del mar Caribe, miles de personas disfrutaron de un espectáculo vibrante en el que la música, la creatividad y la identidad nacional fueron protagonistas.
Este año, la provincia de San Cristóbal fue la gran homenajeada, reconociendo su riqueza cultural y el crecimiento de su propio carnaval, que en los últimos años ha obtenido numerosos premios. La jornada comenzó con la participación de los reyes del carnaval, el artista y diseñador Luis Rivas y la comunicadora Jatnna Tavárez, quienes dieron inicio a un desfile que reunió a cerca de 150 comparsas de todo el país.
El recorrido estuvo marcado por la presencia de personajes emblemáticos como ‘Roba la gallina’, ‘Califé’, los ‘diablos cojuelos’ y los ‘Pepeluses’, además de la tradicional comparsa de los Alí Babá, conocida por sus coreografías y ritmos contagiosos. Durante más de cuatro horas, los asistentes disfrutaron de carrozas decoradas con gran detalle y disfraces que, además de celebrar la identidad dominicana, sirvieron como vehículo de expresión social.
Entre los disfraces individuales más llamativos destacó una representación del expresidente de Estados Unidos Donald Trump, encabezando una comparsa con mensajes en favor de los inmigrantes, con pancartas que reclamaban respeto y derechos laborales. También hubo llamados a la protección del medioambiente y a la paz mundial, con referencias a la guerra entre Rusia y Ucrania.
Para garantizar el orden y la seguridad del evento, el Ministerio de Cultura dominicano desplegó un operativo con más de 1.200 efectivos de los cuerpos de seguridad y organismos de socorro. Gracias a este esfuerzo, el desfile transcurrió sin incidentes, consolidándose una vez más como un espacio de celebración y convivencia.
El Carnaval de República Dominicana es una manifestación de identidad, resistencia y creatividad, que cada año reúne a las expresiones culturales más representativas del país. Con su energía desbordante y su capacidad de unir a la gente en torno a la fiesta y la tradición, este evento sigue consolidándose como uno de los carnavales más importantes de América Latina.