
El expresidente de la CUT señala que la reforma laboral mantiene la tercerización y los contratos basura, mientras el Gobierno presiona movilizaciones sin incluir cambios estructurales.
El profesor y ex presidente de la Central Unitaria de Trabajadores de Colombia (CUT), Diógenes Orjuela, expresó su preocupación sobre la reforma laboral que actualmente se debate en el Congreso.
En una entrevista con un medio nacional, Orjuela calificó el debate como «engañoso», señalando que ni el Gobierno ni la oposición han sido claros sobre el verdadero impacto del proyecto en los trabajadores.
Según Orjuela, la reforma no contempla los derechos colectivos, esenciales para garantizar mejores condiciones laborales.
«Nos quieren meter un entrampamiento entre una oposición que exagera los efectos sobre los empleadores y un Gobierno que vende la reforma como una reivindicación de los derechos de los trabajadores, cuando en realidad no lo es», afirmó.
El exlíder sindical criticó que la propuesta mantiene la tercerización laboral, los contratos a término fijo y las órdenes de prestación de servicios en el sector público, lo que perpetúa la precarización del empleo.
«El Gobierno ha pactado con la oposición no incluir derechos colectivos, que son el alma de cualquier reforma laboral», enfatizó.
Otro punto que preocupa a Orjuela es la falta de un Estatuto del Trabajo, contemplado en el artículo 53 de la Constitución, el cual nunca se ha desarrollado.
«Las centrales obreras propusieron al Gobierno en 2022 y 2023 una verdadera reforma, pero nada de eso ha sido incluido en el proyecto actual», denunció.
Además, criticó la falta de diálogo con los gremios económicos, destacando que el 90% del empleo en Colombia lo generan las micro, pequeñas y medianas empresas.
Para él, una verdadera reforma debería equilibrar la protección de los derechos laborales con medidas que fortalezcan el sector productivo nacional.
Sobre las protestas convocadas para presionar la aprobación de la reforma, Orjuela aseguró que los trabajadores no deben marchar solo porque lo pida el Gobierno.
«Siempre hemos usado las calles para exigir reformas, pero a iniciativa de los trabajadores, no detrás de las movilizaciones del Gobierno», concluyó.
Y.A.