Enrique Pardo Hasche, quien compartió celda con Juan Guillermo Monsalve, se reservó la mayoría de respuestas durante su testimonio, generando tensiones en el juicio contra Uribe.
Durante la segunda semana del juicio oral contra el expresidente Álvaro Uribe, se presentó un nuevo giro en el proceso judicial con la intervención de Enrique Pardo Hasche, quien fue citado como testigo clave.
Pardo Hasche, quien en 2018 compartió celda con Juan Guillermo Monsalve en la cárcel La Picota, fue interrogado por la fiscal Marlenne Orjuela, pero optó por no responder a la mayoría de las preguntas.
Ante las inquietudes de la Fiscalía sobre su relación con Uribe, Pardo Hasche se limitó a decir que “me reservo la respuesta”, citando preocupaciones sobre posibles repercusiones en su propio proceso penal.
El testigo también mencionó que fue contactado por la Fiscalía una semana antes de la audiencia, en un intento de preparar su testimonio. Sin embargo, Pardo Hasche aseveró que había sido “utilizado con métodos tramposos”, sugiriendo que se le presionó para declarar en contra de Uribe.
Esta acusación fue rápidamente desmentida por la fiscal, quien instó a Pardo Hasche a hacer las denuncias correspondientes si consideraba que había sido presionado.
El testimonio de Enrique Pardo Hasche se había considerado crucial, ya que fue quien compartió el pabellón de alta seguridad con Monsalve durante la época en la que Diego Cadena presuntamente ofreció dádivas a cambio de declaraciones a favor de Uribe.
A pesar de las tensiones en el tribunal, la jueza recordó al testigo que tenía derecho a no autoincriminarse, lo que justificó su negativa a responder algunas preguntas.
En este contexto, la defensa de Uribe ha insistido en que el exmandatario es “INOCENTE” y que la acusación carece de fundamentos sólidos, mientras que la Fiscalía sigue adelante con el caso, presentando otros testigos como Héctor Romero, quien también ha sido citado en este juicio.
Y.A.
