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La tragedia revela fallas estructurales en el centro comercial, mientras las autoridades intensifican los trabajos de rescate en medio de la desesperación.
La noche del 21 de febrero de 2025, una tragedia inesperada golpeó la ciudad de Trujillo, Perú, cuando el techo del patio de comidas del centro comercial Real Plaza Trujillo colapsó, dejando tres fallecidos y 78 heridos, muchos de ellos en estado grave. El colapso ocurrió alrededor de las 8:42 p.m., cuando el lugar estaba abarrotado de personas de todas las edades, incluidos niños que jugaban en los juegos infantiles. La tragedia ha desatado una crisis humanitaria, con familiares buscando a sus seres queridos atrapados entre los escombros.
Según las autoridades, el colapso sorprendió a más de 300 personas que se encontraban en el patio de comidas, donde el techo cedió repentinamente. Bomberos, policías y médicos comenzaron de inmediato los trabajos de rescate, pero la falta de maquinaria especializada, como grúas y gatos hidráulicos, dificultó las labores. A pesar de las dificultades, varios heridos fueron rescatados, aunque los esfuerzos continúan, mientras se teme que el número de víctimas fatales pueda aumentar.
El Ministerio de Salud envió un equipo especializado para atender a los afectados, pero las familias han expresado su frustración por la falta de información sobre el paradero de los atrapados. Además, muchos testigos han reclamado la necesidad de maquinaria pesada para agilizar los trabajos de rescate. “Necesitamos grúas y equipos especializados, esto no puede seguir así”, exigieron los testigos.
Mientras tanto, las autoridades han iniciado una investigación para determinar las causas del colapso del techo y si el centro comercial cumplía con los estándares de seguridad. La Fiscalía Provincial Penal Corporativa de Trujillo investiga posibles responsabilidades por la negligencia en la supervisión de la infraestructura. El Indecopi también evalúa si los trabajos de reparación realizados en el centro comercial fueron suficientes.
Las protestas no se han hecho esperar, con los ciudadanos exigiendo justicia y mayor control en la seguridad de los establecimientos comerciales. El futuro de Real Plaza Trujillo está en la cuerda floja, y se teme que enfrente sanciones o incluso cierres si se determina que no cumplió con las normativas necesarias. Mientras tanto, los equipos de rescate siguen trabajando con la esperanza de encontrar más sobrevivientes entre los escombros.
Y.A.
