Las temperaturas extremas y las intensas nevadas que azotaron Virginia y Carolina del Norte este jueves provocaron una emergencia vial sin precedentes, con más de 2.000 accidentes registrados en ambas regiones.
Según informes de las autoridades, Carolina del Norte fue el estado más afectado, con aproximadamente 1.200 colisiones, mientras que en Virginia se reportaron alrededor de 800. El impacto del clima extremo dejó como saldo una persona fallecida y decenas de heridos.
El Servicio Meteorológico Nacional había advertido sobre un «frío potencialmente mortal», y las temperaturas no tardaron en demostrarlo. En Mountain Lake (Virginia), la sensación térmica alcanzó los -25 grados centígrados, mientras que en Burnsville (Carolina del Norte) descendió hasta -20 grados.
Las condiciones meteorológicas obligaron al cierre de múltiples carreteras y complicaron el trabajo de los equipos de emergencia, que lucharon contra la nieve y el hielo para atender los accidentes.
Las autoridades han recomendado a los ciudadanos evitar desplazamientos innecesarios y tomar precauciones ante el riesgo de hipotermia y congelación debido a las bajas temperaturas.