La erosión en Playa Salguero, Santa Marta, sigue generando preocupación entre la comunidad y el sector turístico. A pesar de que un proyecto de emergencia logró recuperar parte de la arena en este punto, la suspensión de las obras ha provocado que el problema se traslade a otras zonas, afectando especialmente a Punta Gloria, que prácticamente ha desaparecido.
Arie Kaplan, líder de una veeduría ciudadana, advierte que la situación sigue siendo crítica. “No hay claridad sobre los próximos pasos para mitigar la erosión. El cambio de administración ha dejado el proyecto a medias y la incertidumbre crece”, afirmó.
El alcalde de Santa Marta, Carlos Pinedo Cuello, ha señalado que su administración está comprometida con la búsqueda de una solución sostenible. Sin embargo, explicó que antes de continuar con las obras es necesario obtener la licencia ambiental y levantar la medida de suspensión impuesta por la Autoridad Nacional de Licencias Ambientales (Anla).
Para agilizar el proceso, la Alcaldía firmó un convenio con la Asociación Colombiana de Ingeniería Sanitaria y Ambiental (Acodal), que se encargará de realizar estudios de impacto ambiental. Con base en estos resultados, se espera presentar una solicitud ante la Anla para reactivar los trabajos de protección costera.
Mientras tanto, la erosión sigue avanzando hacia otras zonas turísticas del sur de la ciudad, como Pozos Colorados y Bello Horizonte, generando preocupación entre hoteleros y comerciantes. “La economía local depende de estas playas. Si seguimos perdiendo territorio costero, el impacto será enorme”, advirtió Kaplan.
La comunidad y el sector turístico insisten en la urgencia de una solución integral que frene el deterioro de las playas y garantice la protección del litoral samario en el largo plazo.