Antonio Sanguino, dirigente del partido Alianza Verde, ha sido nombrado como nuevo Ministro de Trabajo en el Gobierno de Gustavo Petro, en reemplazo de Gloria Inés Ramírez. Sin embargo, su designación llega en medio de cuestionamientos, pues enfrenta un proceso judicial por presunta corrupción.
En octubre de 2024, la Fiscalía General de la Nación imputó a Sanguino por los delitos de tráfico de influencias y cohecho impropio. Según investigaciones, el actual ministro habría intervenido en la designación de una persona cercana a él en un cargo dentro del Hospital de Usme, en Bogotá, cuando se desempeñaba como concejal por el Polo Democrático Alternativo. Además, se le acusa de haber negociado el reparto de recursos destinados a la construcción del centro asistencial.
Estos hechos ocurrieron durante la alcaldía de Samuel Moreno, fallecido en 2023 y recordado por su implicación en el escándalo del “carrusel de la contratación”.
La designación de Sanguino ha generado diversas reacciones en el ámbito político y ciudadano, pues algunos sectores consideran que su nombramiento puede afectar la transparencia del Gobierno en materia de lucha contra la corrupción. Mientras tanto, el recién nombrado ministro no se ha pronunciado oficialmente sobre las acusaciones en su contra.
