Enfrentamientos entre grupos armados han generado desplazamientos masivos y confinamientos en la región.
La crisis en el sur de Bolívar se agrava debido a la violencia desatada por el Clan del Golfo, el ELN y las disidencias de las FARC, cuyos enfrentamientos han provocado el desplazamiento de más de 500 personas y el confinamiento de 144 habitantes en Mina Piojó. Ante esta crítica situación, el gobernador de Bolívar, Yamil Arana, hizo un llamado urgente al Gobierno Nacional para que intervenga con todas sus capacidades y brinde asistencia humanitaria a las comunidades afectadas.
Llamado del gobernador Yamil Arana
A través de su cuenta en X (antes Twitter), el mandatario departamental reiteró la gravedad del conflicto y la necesidad de una respuesta inmediata:
“Cero y van cuatro: volvemos a lanzar un SOS por la situación que se presenta en el sur de Bolívar. Como lo habíamos anticipado, comenzamos a tener desplazamientos y confinamientos de cientos de familias por culpa de la guerra entre estructuras criminales que operan en esta zona del departamento. Requerimos urgentemente la intervención del Estado con TODAS sus capacidades”, escribió Arana.
El gobernador enfatizó que esta región históricamente ha sido un territorio estratégico para los grupos armados ilegales, lo que ha convertido a la población civil en la principal víctima del conflicto. “Lo que está ocurriendo supera las capacidades del departamento. Necesitamos presencia estatal en la zona, no solo intervenciones militares, sino asistencia humanitaria”, afirmó.
Acciones de la Gobernación y llamado al Gobierno Nacional
Ante la emergencia, la Gobernación de Bolívar activó una ruta de protección para las familias desplazadas y anunció un censo para coordinar la entrega de ayudas humanitarias. Sin embargo, el secretario de Paz y Reconciliación de Bolívar, Iván Sanes, advirtió que esta respuesta no es suficiente y reiteró la necesidad de una intervención nacional.
“Hacemos un llamado insistente y recurrente para que el Gobierno Nacional ponga toda su atención en el sur de Bolívar, donde las confrontaciones han aumentado, poniendo en riesgo la vida y la tranquilidad de los pobladores, especialmente en las zonas rurales”, señaló Sanes.
El funcionario comparó la crisis con la del Catatumbo, asegurando que esta región también requiere una atención urgente. “Así como el Catatumbo tiene una merecida atención, el sur de Bolívar también la necesita con urgencia”, afirmó.
Mientras tanto, el conflicto sigue escalando. En Montecristo y Santa Rosa del Sur, los hechos victimizantes como el confinamiento y el desplazamiento forzado se han duplicado e incluso triplicado en las últimas semanas.
Desde la Gobernación de Bolívar, insisten en la necesidad de una respuesta inmediata del Gobierno Nacional para frenar la violencia y evitar que la crisis humanitaria siga empeorando.
Y.A.
