En un sorprendente caso de robo, el empresario Cristian Acosta, dueño de la tienda Casa iPhone, denunció la desaparición de $30 millones que le fueron confiados a su empleado, Yeisson Torrua Orduz, un mensajero de la empresa. Según Acosta, el pasado 31 de enero le entregó dicha cantidad, proveniente de la venta de un vehículo, con la orden de consignarla en un banco. Sin embargo, tras salir del establecimiento alrededor de las 2:00 p.m., Torrua Orduz dejó de contestar las llamadas de su jefe y no regresó a su hogar.
El empresario, al percatarse de la falta tanto del dinero como del trabajador, presentó una denuncia formal por el delito de robo ante las autoridades competentes. Además, decidió hacer pública la situación y ha solicitado la colaboración de la ciudadanía para dar con el paradero de Torrua Orduz, ofreciendo una recompensa de 5 millones de pesos a quien brinde información relevante.
Las autoridades siguen investigando el caso y llaman a cualquier persona que tenga detalles sobre el paradero del mensajero a ponerse en contacto con ellos.
