Petro denuncia tarifas ilegales de generadoras de energía y arremete contra las grandes empresas del sector

Gustavo Petro, presidente de Colombia.

En un nuevo capítulo de su enfrentamiento con las grandes generadoras de energía, el presidente Gustavo Petro acusó a las principales empresas del sector de manipular tarifas y de incurrir en prácticas ilegales para aumentar el costo de la electricidad en Colombia. Durante una reunión con ciudadanos en Barranquilla, el mandatario señaló que las seis principales generadoras de energía del país emplean una fórmula tarifaria elaborada por la Comisión de Regulación de Energía (Creg), la cual, según Petro, favorece a las grandes corporaciones y perjudica a los consumidores.

«Las tarifas que nos imponen son ilegales», declaró Petro, quien explicó que la fórmula tarifaria actual permite a las generadoras vender electricidad a precios desmesurados. Aseguró que los costos de Isagén, EPM, y otras generadoras, son extremadamente bajos debido a la abundancia de recursos hídricos y la depreciación de las turbinas utilizadas en la generación de energía. Sin embargo, señaló que estas empresas venden la electricidad a precios que corresponden a la generación de energía a partir de fuentes como el gas, cuyo precio está influenciado por la guerra en Ucrania.

Petro también recordó que, en diciembre de 2023, se aprobó una nueva fórmula tarifaria que clasificó a los generadores en dos grupos: los de bajo costo y los de alto costo. A pesar de este ajuste, las tarifas continúan siendo elevadas, lo que ha llevado al presidente a calificar las actuales tarifas como «ilegales» e injustificables.

El presidente no se limitó a criticar las políticas tarifarias. También apuntó hacia la privatización de Isagén, una decisión tomada bajo la administración del exvicepresidente Germán Vargas Lleras y el exministro de Hacienda Mauricio Cárdenas, quienes vendieron la empresa a una firma privada sin la debida transparencia ni la competencia de otros oferentes. Petro argumentó que esta venta permitió a la multinacional Brookfield, actual dueña de Isagén, fijar precios sin la intervención del Estado.

“En el momento en que Vargas Lleras vendió Isagén, perdimos la capacidad de regular los precios de la energía en el país”, afirmó el mandatario. Además, Petro se refirió al elevado margen de rentabilidad de las generadoras, citando que el costo promedio de generación de un kilovatio hora es de solo 100 pesos, pero estas empresas lo venden hasta en 1.300 pesos. «Ni la cocaína tiene esa rentabilidad en Colombia», afirmó Petro.

En respuesta a las amenazas de Brookfield de demandar el decreto que regula las tarifas de energía, el presidente instó a la Superintendencia de Servicios Públicos y al Ministerio de Minas y Energía a negociar con las generadoras para reducir las tarifas. En caso de no llegar a un acuerdo, Petro ordenó la aplicación de un decreto que impondrá sanciones a las empresas que se nieguen a cumplir con la nueva normativa.

El debate sobre las tarifas de energía eléctrica y la privatización de empresas públicas sigue siendo un tema crucial en la agenda política del gobierno de Petro, que busca regular el sector energético y proteger los intereses de los consumidores.

Y.A.