En el Distrito de Riohacha, crece la preocupación entre la comunidad debido a la transformación de juegos aparentemente inocentes entre adolescentes en actos violentos que alteran el orden público. Los residentes exigen acciones contundentes por parte de las autoridades locales y mayor supervisión de los padres de familia para frenar esta problemática.
En sectores como las carreras 8 y 7H, entre las calles 18 y 27, grupos de jóvenes organizan encuentros convocados a través de redes sociales. Estos comienzan con simples lanzamientos de bolsas de agua, pero con frecuencia evolucionan hacia enfrentamientos físicos donde utilizan piedras y machetes, generando un ambiente de inseguridad en los barrios.
Dinora Gómez, residente del barrio Nazaret, expresó su preocupación: “Estos enfrentamientos siempre empiezan como juegos y terminan en agresiones. Necesitamos controles efectivos para evitar que esta situación se salga de control”.
La policía intervino recientemente en uno de estos encuentros, deteniendo a un adolescente señalado de incitar a la violencia. Aunque no se ha emitido un informe oficial, este hecho refleja la gravedad del problema y la necesidad de medidas inmediatas.
Las autoridades locales han solicitado a los padres que estén atentos a las actividades de sus hijos y evitar que participen en este tipo de reuniones. Además, hicieron un llamado a la comunidad para reportar cualquier caso de enfrentamiento, garantizando así una respuesta oportuna.
La situación ha puesto de manifiesto la urgencia de promover una convivencia pacífica en los barrios de Riohacha, evitando que estas prácticas sigan poniendo en riesgo la seguridad y la tranquilidad de sus habitantes
