Fraude en el sistema de salud: 15 mil traslados ficticios y un saqueo sistemático

Fraude en el sistema de salud colombiano // Foto: Imagen creada con IA.

Por: Redacción Web.
Diario La Libertad.

La corrupción que atraviesa el sistema de salud en Colombia no cesa de sorprender por su magnitud. Félix Martínez, director de la ADRES (Administradora de los Recursos del Sistema General de Seguridad Social en Salud), reveló un caso que ejemplifica el descarado saqueo de los recursos públicos: una sola persona fue registrada con 15 mil traslados en ambulancia, un fraude que refleja las profundas irregularidades que desangran la salud del país.

Este no es un hecho aislado. La Contraloría General de la República (CGR) ha documentado fraudes multimillonarios en el sistema de salud, donde se incluyen cobros por atención a personas fallecidas, traslados simultáneos de ambulancias en varios puntos, y servicios médicos a pacientes inexistentes. Durante 2022, este tipo de irregularidades generaron pérdidas por más de $283.000 millones, una cifra alarmante que afecta directamente a los ciudadanos más vulnerables.

El modus operandi del fraude

Las EPS (Empresas Promotoras de Salud), junto con algunas IPS y funcionarios corruptos, se han convertido en las principales responsables de este robo. Inflan facturas, justifican gastos inexistentes y, cada año, manipulan cifras para exigir aumentos en la Unidad de Pago por Capitación (UPC). Según Martínez, estos actos no solo afectan la sostenibilidad del sistema, sino que también representan un crimen de gran impacto social.

Entre los casos más destacados, se encontró que en ciudades como Cali, Montería y Valledupar, el 96% de las facturas fraudulentas correspondían a solo dos empresas, evidenciando un esquema perfectamente articulado. Incluso, se reportaron casos absurdos como el de un motociclista «accidentado» 20 veces en dos años y 15 personas que «recibieron atención médica» después de morir.

El impacto humano de la corrupción

Cada peso robado del sistema de salud significa menos vacunas, medicamentos y atención para quienes realmente lo necesitan. Los ciudadanos, especialmente aquellos en condiciones de vulnerabilidad, enfrentan barreras para acceder a servicios básicos mientras los responsables del saqueo continúan operando con impunidad.

El descarado saqueo de los recursos del sistema de salud colombiano no solo es un problema financiero, sino un atentado directo contra la vida y la dignidad de los ciudadanos. La falta de controles efectivos y la complicidad de actores dentro del sistema perpetúan esta crisis, mientras millones de colombianos continúan pagando el costo del silencio y la corrupción.

Y.A.