Feliz traslación terrenal

Por: Joaquín Baena Arevalo

“A veces creo que nada tiene sentido. En un planeta minúsculo que corre hacia la nada desde hace millones de años, nacemos en medio de dolores, crecemos, luchamos, nos enfrentamos, sufrimos, hacemos sufrir, gritamos, morimos, mueren y otros están naciendo para volver a empezar la comedia inútil”
Ernesto Sabato.

Estás fechas en que revivimos el mito de la Virgen María, del nacimiento de un redentor ,creencias que hunden sus raíces en un mito persa y más tarde se adecúa en el culto a Mitra por parte de los romanos para luego ser asimilado por las culturas cristianas y musulmanas, las cuales se articularon también a las alabanzas del dios Jano y la celebración efusiva del movimiento de traslación;todas estas costumbres con raíces y antecedentes religiosas, sincretizados con las tendencias judeocristianas. A partir de allí, tengo las siguientes consideraciones sobre los deseos para el 2025.

La tierra tiene varios movimientos, entre ellos el movimiento de traslación que lo hace aproximadamente en 365 días describiendo una órbita elíptica, alrededor del Sol, movimiento que de una u otra forma nos conduce a la finitud en el sentido de nuestra experiencia terrenal, pero que también nos inscribe en un movimiento eterno de explosión e implosión. La tierra como planeta tiene una antigüedad de aproximadamente 4.600 millones de años, que es cuando se formó el Sistema Solar. En esa misma dirección, los dinosaurios existieron durante 345 millones de años y nosotros somos unos imberbes que después de un proceso evolutivo aparecimos hace unos 10.000, años, somos unos bebés desde la óptica cronológica, demiurgos, creadores de tecnologías, inteligencia artificial inimaginables, los negocios se resuelven a través de la analítica de datos o el Blockchain, sin que se pierda de vista que hemos visitado la luna y explorado parcialmente el cosmos, dicho en otros términos: somos caminantes de ese conocimiento inagotable.

Alborozados celebramos el 31 de diciembre, de esa marcha hacia la finitud, hacia la ineludible partida , pues tal circunstancia debe aguardarse con dignidad viviendo a plenitud, sin embargo , es complicado resignarse a “ aceptar la muerte de un hombre querido y admirado” como en su momento expresó Octavio Paz ante el fallecimiento de Borges, cuando expresó que: “ Desde el momento en que nacemos esperamos morir, pero la muerte nos sorprende. En este caso lo esperado es siempre lo inesperado, siempre lo inmerecido. No importa que Borges haya muerto a los 86; no estaba listo para morir. Nadie lo está, a ninguna edad. Uno puede invertir la frase filosófica y decir que todos nosotros – viejos y niños, adolescentes y adultos – somos frutos recogidos antes de su tiempo”.

En ese mismo contexto , Sísifo, personaje de un mito griego narra la historia de un rey de Corinto, quien quiso engañar a la muerte y fue condenado por Zeus, su castigo fue cargar una pesada roca que debía llevar a la cima de una montaña, roca que permanentemente se le caía y tenía que repetir la tarea, esa misma tarea que repetimos los humanos cargando nuestra propia roca en la vida, nos levantamos, desayunamos, trabajamos, almorzamos, nos desinformamos con la TV, la radio y el poder mediático, dormimos y volvemos a repetir la tarea todos los días, hasta que la parca nos haga el llamado, no hay posibilidad de engañarla, no podemos hacer el intento de Sísifo.

Decía Shopenhauer en su teoría de la voluntad, que todo es voluntad de vida, en este mundo absurdo, en esa voluntad de vida todo se mueve sin aparente sentido, Nietzsche al respecto se refirió a la voluntad de poder, lo que en el psicoanálisis es la pulsión de creación y auto conservación-Eros y de verdad que el mundo es el mundo de lo inesperado, del goce y padecimiento, donde construimos verdades con nuestros imperfectos insumos cognitivos y creamos una ciencia, abordamos investigaciones, producimos tecnología con las limitaciones de nuestros órganos de percepción humana y nuestra capacidad de razonar, de la doxa a la episteme, vamos avanzando en el inagotable y siempre inacabado conocimiento.

Kant, de igual manera nos señalaba que conocemos el fenómeno, pero no el noúmeno, es decir la cosa en sí; dentro de este péndulo entre el placer y los infortunios se mueve nuestra existencia. Para Spinoza la Naturaleza-Dios es su propia causa y la única esencia existente. Este filósofo judío, creía que hay una sola sustancia, a la que podemos llamar Dios o Naturaleza, que engloba todas las cosas, cada una de las cuales es un atributo, un aspecto, del Todo, y que si había un camino espiritual para llegar a la paz interior este pasaba por la lógica, por el incremento racional de la comprensión de las leyes de la Naturaleza, y por el amor de Dios y la práctica del bien.

En este mundo donde estamos eyectados, escribía Jean Paul Sartre, sin que exista nada sobrenatural que nos proteja y mucho menos nos salve, donde debemos ser responsable con nuestra libertad, con nuestra historia a través de nuestras decisiones, en este mundo donde tenemos que luchar por una mejor justicia social, no le voy a desear a familiares y amigos un nuevo año lleno de alegrías y fantasías, de fortunas y abundancia, esto pertenece al mundo de la magia y la plasticidad, de las mentiras, pero si les deseo que tengamos la valentía de entender la realidad, es decir qué hay cosas como decían los estoicos que podemos transformar y no detenernos en aquellas que no podamos cambiar.

Reconocer que existe el otro, con errores, máculas e imperfecciones propias de la naturaleza humana, que tratemos de superar la envidia, como también ser leal¸ pues hay veces que deseamos el bien a los conocidos pero nunca jamás que ese conocida supere nuestro status, hacemos murmuraciones a hurtadillas sobre aquellos que decimos querer, pero no tenemos la franqueza de comentarle a ese ser querido.

Por ello, deseo que superemos rencores, que no vivamos en el pasado (depresión) ni en la angustia del futuro (ansiedad) que seamos tolerantes con el creyente o con el ateo. Deseo que tengamos fuerza para admitir los imponderables, las partidas, las desgracias, enfermedades y todo lo que produzca dolor, que amemos intensamente el entorno familiar y de amigos, dado que es la única oportunidad que tenemos de hacerlo. En tal virtud, se debe disfrutar los momentos de alegría, con expresión del beso, y con manifestación de un “te quiero”, emprendiendo con pasión y disciplina lo que se hace en búsqueda del Estado -bienestar, el cual no se consigue solo con los deseos de Año Nuevo, dado que este se construye con familia , sociedad y Estado.

Bajo este panorama, no puede quedarse por fuera el sentimiento intenso del ser humano: el Amor, que es trascendental para nuestra existencia, por lo que compartimos lo que dicen los especialistas, en el sentido que” la esencia del amor es trabajar por algo”. Se ama aquello por lo que se trabaja, y se trabaja por lo que se ama. Erich Fromm nos enseña, que el amor no es sólo una relación personal, sino un rasgo de madurez que se manifiesta en diversas formas: amor erótico, amor fraternal, amor filial, amor a uno mismo. Nos dice además que el amor no mecánico, como a veces nos induce a creer la sociedad de hoy. Todo lo contrario, el amor es un arte, el fruto de un aprendizaje. Por ello, si queremos aprender a amar debemos actuar como lo haríamos si quisiéramos aprender cualquier otro arte, ya sea música, pintura, carpintería o el arte de la medicina, y por supuesto el propósito es cultivar el verdadero arte de amar. “El amor intenta entender, convencer, vivificar. Por este motivo, el que ama se transforma constantemente. Capta más, observa más, es más productivo, es más él mismo.”
Pablo escribió en la carta a los Corintios, que “ El amor es sufrido, es benigno; el amor no tiene envidia, el amor no es jactancioso, no se envanece; no hace nada indebido, no busca lo suyo, no se irrita, no guarda rencor; no se goza de la injusticia, más se goza de la verdad”.

En atención a lo anterior , ha de decirse entonces , que debe tenerse amor propio para enfrentar todas las circunstancias sin desfallecer, y en ese entendido debemos saber manejar la convivencia, que amemos a nuestros hijos , que tengamos la tolerancia de François-Marie Arouet, (Voltaire), en armonía con la formación ciudadana para un mejor país, que no destruyamos a nadie y que tengamos presente las tres filtros de Sócrates:

1) ¿Lo que me vas a decir es verdad?
2) ¿Es algo bueno lo que me vas a decir de mi amigo?
3) ¿Será útil lo que más a decir?

Que la felicidad sea nuestro camino y no tu meta, que solo entendiendo la realidad, comprendiéndola podemos aceptarla y adaptarnos a ella, sin permitir s que pase un día sin crecer, como decía el poeta Walt Whitman “Somos seres humanos llenos de pasión, la vida es desierto y es oasis, nos derriba, nos lastima, nos convierte en el protagonistas de nuestra propia historia”

Por ello , les deseo que sacudamos las cadenas de la corrupción, que derribemos los ídolos y los becerros de barro que nos ha construido el poder mediático , becerros que se han robado y se están robando la ciudad, ese mismo poder que de manera inexplicable pretenden hacerle creer a los pobres que subirles el salario es perverso. Así mismo, les deseo que entendamos que las transformaciones no solamente se dan cambiando al ejecutivo, sino también aplicando una profilaxis al legislativo. Les deseo a mis conciudadanos que luchemos por una ciudad más próspera, pero con control social y seguimiento para verificar la real inversión de nuestros impuestos, denunciando ante los Órganos de Control del Estado el robo de nuestros dineros y por supuesto que la energía solar fotovoltaica llegue al territorio del Caribe para desfosilizarnos y quitarnos con denuncia ciudadana la carga de las tarifas impagables del servicio público de energía..
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Deseo para el Estado Nacional , que las grandes reformas que necesita el pueblo sean aprobadas, que el sistema de salud funcione, que los colombianos y los maestros en particular puedan elegir libremente sus IPS y lugares de dispensación , que la vida esté por encima de cualquier criterio mercantilista , que libere al gobierno del presidente Petro de malas compañías, (asesores, ministros y directores de institutos descentralizados) , que el país con los jóvenes y comunidad académica empiece a debatir con altura respecto al “Poder Constituyente” vs “Poder Constituido”; además que se empiecen a estudiar las tesis del jurista y filósofo italiano Luigi Ferrajoli sobre Paz y Constitucionalismo Garantista , Maestro de Maestros, quien viene promoviendo en el mundo que los derechos fundamentales tienen una estrecha relación con la paz, ya que la paz es el medio para asegurar la vida y la supervivencia, valores que fundamentan a los derechos fundamentales.
Esos son entre otros mis deseos para el 2025.