En la tarde del viernes, un grupo de al menos ocho hombres armados, presuntamente vinculados a disidencias de las FARC, protagonizó un fallido intento de robo en una sucursal del Banco Agrario, ubicada en el municipio de Suárez, Cauca.
Según reportes oficiales, los delincuentes ingresaron al lugar y colocaron un chaleco que simulaba contener explosivos a uno de los empleados del banco, buscando intimidar al personal para obtener el dinero de las cajas. Sin embargo, la rápida reacción de la Policía, alertada por la comunidad, generó un enfrentamiento armado que frustró los planes de los asaltantes.
Aunque lograron acceder a una pequeña cantidad de dinero, los criminales abandonaron el botín junto con otros objetos al huir del lugar. El coronel Giovanni Torres, comandante de la Policía del Cauca, detalló: “Los hombres armados colocaron el chaleco a uno de los empleados mientras recolectaban el dinero en una bolsa. Tras el operativo, el chaleco fue detonado de manera controlada para descartar la presencia de explosivos”.
Por su parte, el presidente del Banco Agrario, Hernando Chica Zuccardi, condenó este nuevo acto vandálico, recordando que otras oficinas de la entidad en el Cauca, como las de San Sebastián, Morales, Corinto y Caloto, han sido blanco de ataques similares. La entidad también alertó sobre incidentes recientes en otras regiones del país, afectando sucursales en Norte de Santander y Huila.
“El mayor impacto de estos hechos lo sufre directamente la comunidad”, afirmó Chica Zuccardi, reiterando el compromiso del banco con los habitantes de las zonas afectadas.
Este incidente pone nuevamente en evidencia la inseguridad que enfrentan las regiones afectadas por los grupos armados, dejando un llamado urgente a las autoridades para reforzar las medidas de seguridad en estas áreas vulnerables.
