Con la llegada del nuevo año, los colombianos se enfrentan a una serie de incrementos en diversos servicios y tarifas, derivados de la inflación que se medirá a través del Índice de Precios al Consumidor (IPC). Este indicador será fundamental para determinar los ajustes en los costos de vida en el país durante el 2025.
El Banco de la República prevé que la inflación anual cierre alrededor del 5,3%, lo que afectará principalmente los siguientes sectores:
- Arriendos: Los contratos de arrendamiento podrían experimentar un aumento proporcional al cierre de la inflación, lo que significa que los inquilinos podrían ver incrementados sus pagos mensuales.
- Peajes: Desde el 1 de enero, las tarifas de los peajes en Colombia subirá un 4,65%. Este ajuste busca compensar el congelamiento que se implementó en 2023.
- Servicios públicos domiciliarios: Facturas de agua, electricidad y gas se ajustarán según el IPC, lo que impactará los gastos de los hogares colombianos.
- Cuotas de administración: En los conjuntos residenciales, las cuotas de administración también podrían aumentar, dependiendo de cómo se ajuste el IPC o el salario mínimo.
Estos cambios económicos subrayan la importancia de una planificación financiera adecuada, ya que la inflación afecta directamente la capacidad de consumo y el costo de vida. Con la implementación de estos ajustes, los colombianos deberán prepararse para enfrentar un 2025 lleno de desafíos económicos.