En plena celebración de Navidad, la Dimayor ha tomado una decisión firme contra el América de Cali, imponiéndole severas sanciones tras los incidentes ocurridos en la final de vuelta de la Copa Colombia contra Atlético Nacional, el pasado 15 de diciembre, en el estadio Pascual Guerrero.
El organismo rector del fútbol colombiano ha determinado que el conjunto escarlata deberá cumplir con una sanción de seis partidos a puerta cerrada, los cuales se jugarán en su estadio o en una sede alterna, sin la presencia de público. Esta medida es consecuencia de los desmanes y altercados generados por algunos hinchas del club caleño durante el desarrollo del partido, que provocaron una situación de caos en el recinto deportivo.
Multa Económica y Pérdida Automática del Partido
La sanción también incluye una multa económica de 10.075.000 pesos colombianos, que se divide en dos partes. Por un lado, 3.575.000 pesos por la infracción a varios numerales del artículo 84 del Código Disciplinario Único (CDU) de la Federación Colombiana de Fútbol, y por otro lado, 6.500.000 pesos adicionales debido a los desmanes ocurridos, lo que incrementa el impacto financiero para el club.
Además de las sanciones mencionadas, América de Cali ha perdido automáticamente el partido por 3-0 debido a una infracción al literal H del artículo 83 del CDU, lo que deja la serie de la final de la Copa Colombia con un marcador global de 6-1 a favor de Atlético Nacional, quienes se coronaron campeones del torneo.
La decisión de Dimayor llega como parte de su política de lucha contra la violencia en los estadios y como un recordatorio de que los actos de violencia y desorden no serán tolerados en el fútbol colombiano. Con esta sanción, se busca garantizar que los partidos se desarrollen en un ambiente de respeto y seguridad para jugadores, cuerpo técnico y aficionados.
