Rechazo en Panamá a la amenaza de Trump sobre el Canal: «El canal es panameño»

El presidente de Panamá, José Raúl Mulino, y diversas figuras políticas y ciudadanos han respondido en bloque a las amenazas del presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, quien sugirió que exigiría la devolución del Canal de Panamá debido a las tarifas de peaje que considera demasiado altas.

En un mensaje difundido por el Gobierno, Mulino reafirmó que el Canal de Panamá «es de Panamá y lo seguirá siendo», haciendo hincapié en la soberanía e independencia de su país.

El canal, un paso vital para el comercio mundial que conecta el océano Atlántico con el Pacífico, fue transferido a Panamá el 31 de diciembre de 1999, después de la firma de los Tratados Torrijos-Carter en 1977. Estos acuerdos garantizaron la soberanía de Panamá sobre la vía interoceánica, así como su neutralidad permanente, permitiendo su uso seguro por todas las naciones.

En respuesta a las declaraciones de Trump, el exadministrador del canal, Jorge Luis Quijano, recordó que el Tratado de Neutralidad establece que solo Panamá puede gestionar el canal. Además, analistas panameños como José Stoute criticaron la postura de Trump, sugiriendo que sus comentarios representan una violación del tratado y una posible amenaza de intervención militar, similar a la invasión estadounidense de 1989.

La creciente preocupación por la presencia de China en la región también fue mencionada como un trasfondo de las críticas de Trump. Sin embargo, tanto el presidente Mulino como otros funcionarios panameños dejaron claro que el Canal de Panamá sigue bajo control de su país y que cualquier intento de recuperación por parte de Estados Unidos es inviable.