En un esfuerzo por transformar la agricultura en Bolívar, la Universidad de Cartagena y la Agencia de Desarrollo Rural (ADR) están liderando el proyecto Servicio Público de Extensión Agropecuaria, que beneficia a 5.568 agricultores en 31 municipios del departamento. Esta iniciativa busca modernizar las prácticas agrícolas y promover la sostenibilidad, mejorando la calidad de vida de los productores y fortaleciendo las cadenas productivas locales.
El programa abarca las siete Zonas de Desarrollo Económico y Social (ZODES) de Bolívar: Norte, Dique, Montes de María, Mojana, Isla Mompox, Loba y Magdalena Medio. Según el Plan Departamental de Extensión Agropecuaria 2024-2027, estas regiones fueron priorizadas para asegurar un impacto significativo en la productividad y competitividad de los cultivos.
Sandra Ramírez, directora territorial de la ADR en Cartagena, explicó que la iniciativa busca no solo mejorar los cultivos, sino también fomentar prácticas más limpias, reduciendo el uso de químicos y rescatando técnicas ancestrales. “La sostenibilidad es clave para garantizar que la producción agrícola sea amigable con el medio ambiente y beneficiosa para la salud de las comunidades”, afirmó.
La Universidad de Cartagena, como entidad técnica del proyecto, lidera la capacitación en prácticas agropecuarias, acuícolas y pesqueras. También se enfoca en la planificación territorial y la implementación de sistemas productivos sostenibles, integrando conocimientos tradicionales con innovaciones tecnológicas.
Bertha Arnedo Redondo, vicerrectora de extensión de la Universidad de Cartagena, resaltó que el programa combina infraestructura, talento humano y compromiso social. “Estamos dando a los campesinos las herramientas necesarias para transformar sus predios en espacios más productivos y sostenibles, contribuyendo al desarrollo del departamento”, explicó.
Caracterización territorial: un enfoque personalizado
Una de las primeras etapas del proyecto fue la Caracterización Territorial Participativa (CTP), que identificó las necesidades específicas de cada región. En Montes de María, por ejemplo, se completaron 25 caracterizaciones que servirán como base para implementar Escuelas de Campo, donde los agricultores podrán aprender y compartir experiencias para optimizar sus cultivos.
El proyecto no solo busca incrementar la productividad, sino también fortalecer aspectos como manejo postcosecha, estrategias comerciales y acceso a mercados. Se espera que los beneficiarios desarrollen habilidades para gestionar sus territorios de manera eficiente, logrando mayor rentabilidad y mejorando la calidad de vida de sus familias.
Con este programa, Bolívar da un paso adelante en la construcción de un modelo agrícola sostenible, demostrando cómo la colaboración entre instituciones puede impulsar el desarrollo rural y garantizar un futuro más prometedor para los productores del departamento.