Por; Alfonso Camerano Fuentes
Recoge sus pasos en la tierra el amigo, colega, compadre y luchador de causas justas Fernando Arturo Niño Molina.
Se hizo abogado en la Universidad Libre de Colombia después de estudiar Sociales en la del Atlántico.
De recia formación jurídica e intelectual forjó su talla de ser social polémico, líder político y gremial, al lado de la clase trabajadora, que asesoró en delicados procesos de fuero y prestacionales, distinguiéndose en la defensa de los trabajadores y profesores de la Universidad Libre de Barranquilla.
Fernando fue un entrañable amigo, abierto al diálogo y al debate de ideas, hizo gala de una inteligencia brillante, abrevando en las fuentes teóricas y ejemplo de los líderes del proceso histórico libertario de la Humanidad, aplicados al controvertido y polarizado de la Nación colombiana.
Se echó al hombro el enconado debate electoral que llevó a la Alcaldía al reconocido líder Carlos Zambrano, hoy en el Oriente eterno, acompañándolo en su gestión de gobierno, en nombre de organizaciones alternativas, que marcaron un hito en los municipios del Caribe Colombiano.
Participó activamente en el Pacto Histórico, defendiendo las Reformas Políticas, Económicas y Sociales del Gobierno, con ideas y orientaciones de su clara inteligencia y experiencia de probado líder formado en la academia y en la praxis política.
Acompañó las Asambleas de Juntos Llegamos, aportando ideas de luz que abren camino a las profundas transformaciones que libra el pueblo colombiano frente a una oligarquía que se resiste a compartir la riqueza colectiva.
En estos últimos años sufrió una lesión hepática que se le complicó hace 30 días, los finales de su vida; ayer sábado, al mediodía, recibió el parte médico sin amilanarse, batalló hasta el último momento; acompañó en la oración al sacerdote y pidió Misericordia por él al Altísimo, con la esperanza de seguir viviendo al lado de sus hijos, familiares y amigos, pero había llegado su hora
Deja un legado de honestidad, sabiduría, luchador incansable por la Justicia Social, buen padre, familiar y amigo.
Nos haces falta Fernando, pero tu ejemplo nos estimula a seguir en la trinchera.
Chao, Compadre querido..












