Por presunta tala ilegal de la vegetación CRA detiene actividades de amarillo en Barranquilla

La Corporación Autónoma Regional del Atlántico (CRA) ha ordenado la suspensión inmediata de las actividades de la constructora Amarilo S.A.S. en el sector de Alameda del Río, Barranquilla, debido a denuncias sobre la tala no autorizada de vegetación.

La medida se tomó tras recibir quejas de organizaciones locales como «Los Guardianes Verdes» y «Club Jardinería», quienes alertaron sobre presuntas infracciones ambientales en la zona donde Amarilo está desarrollando su proyecto urbanístico.

La CRA explicó que, después de varias visitas técnicas a la zona, se constató que la constructora estaría realizando actividades de aprovechamiento forestal sin contar con los permisos ambientales correspondientes. Estas acciones incluyen la remoción de vegetación en terrenos de 1,58 y 1,71 hectáreas, que están ubicados entre las carreras 43 y 43B con calles 114, 116 y 117, áreas que forman parte de la expansión urbana del Distrito.

Entre las presuntas irregularidades identificadas, la CRA también señaló la remoción de la cobertura vegetal para la construcción de una vía sin autorización, la disposición inapropiada de residuos sólidos y vertimientos de aguas residuales asociadas a la fabricación de concreto, lo que podría haber afectado el ecosistema local.

Bleydy Coll Peña, subdirectora de Gestión Ambiental de la CRA, detalló que la medida preventiva continuará hasta que Amarilo presente la documentación necesaria que certifique el cumplimiento de la normativa ambiental. La CRA también solicitó a la constructora implementar acciones correctivas para el manejo adecuado de los residuos y la gestión ambiental en el área de trabajo.

Sin embargo, Amarilo ha defendido su posición, asegurando que la suspensión solo afecta temporalmente las actividades de tala en los lotes y que no ha iniciado obras dentro de los predios. La empresa aclaró que entregará todos los documentos pertinentes a la CRA para demostrar que no ha incurrido en ninguna infracción y que las actividades de urbanización en la zona cuentan con la licencia ambiental correspondiente.

La situación sigue bajo evaluación por parte de la autoridad ambiental, mientras que la constructora se prepara para presentar su defensa en el proceso sancionatorio en curso.