Magdalena inaugura nuevo Centro de Vida para el Adulto Mayor en Guamal: un avance en la dignificación de la vejez

Con la apertura de un nuevo Centro de Vida para el Adulto Mayor en el municipio de Guamal, Magdalena sigue avanzando en su compromiso con el bienestar de los abuelos.

Este espacio, que beneficiará a más de 4.600 adultos mayores de la subregión sur del departamento, se suma a los tres centros ya construidos en la región, consolidándose como un modelo de política pública al servicio de los más vulnerables.

El acto de inauguración estuvo marcado por la presencia del exgobernador Carlos Eduardo Caicedo Omar, quien había colocado la primera piedra de este proyecto, y el actual gobierno, que ha continuado la labor en favor de los adultos mayores. «Este Centro de Vida simboliza la dignificación y priorización de los recursos públicos, un paso firme hacia una vejez digna para nuestros abuelos«, expresó el mandatario actual.

Este nuevo centro, construido sobre 2,578 metros cuadrados, se destaca por su infraestructura moderna y completa, diseñada para ofrecer atención en salud, recreación, nutrición y actividades deportivas. Con una inversión superior a los 6.200 millones de pesos, el Centro de Vida de Guamal se convierte en un espacio único para la región, que no solo cubre las necesidades básicas de los adultos mayores, sino que también promueve su bienestar físico y emocional.

Además, el gobierno ha anunciado que el próximo año comenzarán operaciones otros cuatro centros similares en el departamento, lo que refuerza el compromiso con el cuidado y la dignificación de los adultos mayores en Magdalena.

«Seguimos cumpliendo con hechos concretos que transforman la vida de nuestros ciudadanos, y este centro es un ejemplo claro de cómo las políticas públicas pueden mejorar la calidad de vida de las personas«, afirmó el actual gobernador.

Con esta nueva obra, el Magdalena continúa avanzando en la construcción de una sociedad más inclusiva y justa para todos, especialmente para aquellos que han dado su vida por la región y merecen una vejez tranquila y digna.