En la Comisión Primera de la Cámara de Representantes fue aprobado el proyecto de ley por medio del cual se plantea fortalecer
el control social por medio del cual la ciudadanía puede vigilar, fiscalizar, investigar y
controlar la administración y gestión de lo público, esto fortaleciendo el Estatuto Nacional de Veedurías.
La iniciativa de autoría de los congresistas de Alianza Verde Cathy Juvinao y Alejandro García destaca que el papel de las veedurías es fundamental para empoderar a la ciudadanía dándole garantías para el control social.
En esa línea, explicaron que las veedurías ciudadanas actúan como un contrapeso del poder político, fortalecen la democracia, son
mecanismos de control a la contratación estatal e impulsan los procesos de participación ciudadana y comunitaria.
Por lo anterior, el proyecto propone reformar la Ley 850 de 2003 y la 1757 de 2015 para fortalecer la normativa que
rige actualmente el funcionamiento de este mecanismo de participación ciudadana y asegurar que la Contraloría Delegada para la Participación Ciudadana de la Contraloría General de la República, la Procuraduría General de la Nación, y las demás instituciones que componen la red institucional de apoyo a las veedurías, les brinden acompañamiento constante y las asistan en los procesos de vigilancia y control.
De igual forma, se busca garantizar medidas de protección especial y seguridad con tratamiento prioritario para los veedores víctimas de amenazas y hostigamientos, beneficios para acceder a educación superior y
capacitaciones que les permitan enriquecer sus conocimientos específicos.
Por otra parte, plantea un nuevo sistema de inscripción en el Rues para fomentar ajustes y facilidades en las tarifas y mejoras en el procedimiento.
Al respecto, la congresista Juvinao indicó:”estamos cumpliendo una promesa de campaña y, como veedora durante muchos años, también una bandera de mi corazón”, indicó.
“La veeduría fortalece las instituciones, previene la corrupción y garantiza un gobierno más justo y responsable. La transformación de Colombia empieza de abajo hacia arriba, desde la ciudadanía hacia los políticos”, concluyó.