Los agricultores del sur del Atlántico están enfrentando una grave crisis debido al paro de los trabajadores de los distritos de riego en los municipios de Repelón y Santa Lucía, lo que pone en peligro cultivos de plátano, limón Tahití y palma de aceite. La causa del paro es la falta de pago por parte de la empresa Funrural, que tiene más de 15 días sin cumplir con los pagos a los trabajadores, acumulando tres quincenas impagas.
Julio Villa, líder social y exconcejal de Repelón, expresó su preocupación por la situación, indicando que los agricultores han declarado alerta roja debido a la paralización de los sistemas de riego. Los canales de drenaje están obstruidos y los cultivos, que forman parte de proyectos productivos claves, no están recibiendo el agua necesaria. Esta crisis se agrava por la escasez de lluvias en el municipio de Repelón durante 2024, con una cantidad de precipitaciones mucho menor a la de otras zonas cercanas como Barranquilla y su Área Metropolitana.
Los sistemas de riego de la región dependen del agua proveniente del embalse del Guájaro, que es distribuida a través de una red de canales y reservorios. Sin embargo, en los últimos días, estos canales se han secado y bloqueado, dejando los cultivos vulnerables a la falta de agua. En particular, el cultivo de limón Tahití, que se encuentra en su mejor temporada con buenos precios y menos plagas, podría perderse si la situación no se resuelve pronto.
Los agricultores han solicitado una pronta intervención de las autoridades para garantizar el pago a los trabajadores y reactivar los sistemas de riego, vitales para la supervivencia de sus cultivos y el bienestar económico de la región.