Conflicto ruso-ucraniano cobra la vida de más de 300 colombianos

Canciller Luis Gilberto Murillo.

Por: Redacción Web.
Diario La Libertad.

En un sombrío balance sobre la participación de ciudadanos colombianos en la guerra que enfrenta a Rusia y Ucrania, el canciller Luis Gilberto Murillo reveló cifras impactantes durante una entrevista radial. Según los datos suministrados, al menos 310 colombianos han muerto mientras combatían en el lado ucraniano de este conflicto, que está cerca de cumplir tres años y ha causado la muerte de más de 30.000 civiles.

«Tenemos algunos registros pero lo que nos manifestaron del gobierno ruso y hay que verificar eso, es que tenían información de que los colombianos que estaban involucrados en el conflicto del lado ucraniano eran unos 500, de los cuales manifiestan ellos que algunos han regresado a Colombia, han desertado cerca de 100 y otros 100 se mantienen en combate. Aproximadamente, hay unos 300, 310 que han sido dados de baja«, explicó el canciller a un conocido medio de comunicación nacional.

Participación de «mercenarios» colombianos: una práctica dolorosa

El canciller Murillo lamentó profundamente la participación de connacionales en este conflicto bélico, calificándolo como una práctica ajena a los intereses de Colombia. «Esto es muy doloroso para el país y nosotros no quisiéramos que en ninguno de esos lados se presente esa práctica de tener ‘mercenarios’ de nuestro país y en ningún país del mundo. Nosotros no podemos tener a nuestros conciudadanos participando en esas guerras, en esos conflictos que nada tienen que ver con nosotros», afirmó.

Además de reportar las trágicas pérdidas, el canciller destacó que la información provista por el gobierno ruso señala que, de los 500 colombianos inicialmente involucrados en el conflicto, unos 100 han regresado al país, mientras que otros han desertado o continúan en combate.

Un llamado a la paz en medio de la guerra

El gobierno colombiano, a través de la Cancillería, ha mantenido una postura crítica frente a la escalada militar entre Rusia y Ucrania. Este conflicto, que sigue intensificándose, ha sido condenado en múltiples ocasiones por Colombia, que aboga por una resolución pacífica.

En línea con esta posición, el presidente Gustavo Petro ha reiterado su propuesta de convocar una cumbre de paz internacional, buscando crear un espacio de diálogo y mediación que permita frenar la violencia y avanzar hacia una solución diplomática.

Una reflexión necesaria

La participación de colombianos en guerras ajenas evidencia una preocupante realidad que combina factores como la falta de oportunidades en el país, el atractivo económico de ser combatiente extranjero y la necesidad de regulación sobre esta práctica. Este fenómeno pone sobre la mesa un tema de responsabilidad estatal y social, ya que el involucramiento en conflictos externos tiene implicaciones no solo éticas, sino también diplomáticas para Colombia.

Por otro lado, la posición del gobierno al insistir en una cumbre de paz destaca su intención de jugar un papel activo en la promoción de soluciones pacíficas, aunque queda la incógnita sobre cómo esta propuesta podría materializarse en un escenario global tan complejo.

Y.A.