La Alcaldía de Valledupar ha decretado el estado de calamidad pública y ordenado el cierre de los principales balnearios debido a las fuertes lluvias y crecientes de ríos, en medio de un panorama de riesgo por deslizamientos y viviendas afectadas.
Por: Redacción Web.
Diario La Libertad.
La Alcaldía de Valledupar ha tomado la decisión de declarar el estado de calamidad pública y cerrar temporalmente los balnearios de Hurtado, La Mina, La Vega y Badillo debido al impacto de las fuertes lluvias que han provocado el desbordamiento de los ríos en la región. Esta medida, anunciada tras una inspección de las autoridades en la margen derecha del río Guatapurí, busca salvaguardar la seguridad de las comunidades afectadas y prevenir posibles desastres mayores en áreas vulnerables.
El Consejo Municipal de Gestión del Riesgo de Desastres determinó que las precipitaciones han afectado tanto la zona urbana como rural de Valledupar, con daños especialmente graves en sectores como Nueve de Marzo y Pescaito, donde se reporta que cinco viviendas han sido destruidas en cada comunidad. La magnitud del daño ha forzado a las autoridades locales a implementar medidas de emergencia para atender a las familias perjudicadas y evitar mayores riesgos.

“Se tomó la decisión en un Consejo Municipal de Gestión de Riesgo de cerrar los balnearios. Realizamos visitas técnicas con las entidades operativas y hay zonas de los corregimientos en peligro por deslizamientos en áreas urbanas y rurales. Por eso decretamos la calamidad pública para atender la emergencia con ayudas humanitarias a las familias vulnerables”, explicó Jorge Luis Pérez Peralta, secretario de Gobierno municipal. La declaración de calamidad pública permite a las autoridades actuar con mayor rapidez y facilita la entrega de ayudas a quienes más lo necesitan en estos momentos críticos.

Las lluvias, que han azotado la región de forma continua, también han causado deslizamientos de tierra y bloqueos en las principales vías de acceso, lo que complica la llegada de asistencia y la movilidad de los habitantes hacia otras zonas. Este fenómeno ha intensificado el nivel de alerta, y los funcionarios municipales están monitoreando de cerca la situación en coordinación con entidades de socorro.
El Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales (Ideam) ha advertido que existe un 71 % de probabilidad de que el fenómeno de La Niña empeore las lluvias en los próximos meses, lo que podría agravar aún más la situación en Valledupar y otras áreas del país. Ante esta previsión, las autoridades municipales están trabajando en medidas preventivas y en la preparación de recursos para enfrentar la posible extensión de la emergencia.
El alcalde de Valledupar, Ernesto Orozco, ha manifestado que la administración local, junto con la Policía Metropolitana y la Defensoría del Pueblo, continuará con las visitas técnicas en las zonas más golpeadas por la crisis climática. «La prevención de desastres y el monitoreo constante de las condiciones de riesgo son ahora nuestra prioridad», señaló Orozco, subrayando el compromiso de su gobierno con la protección de la ciudadanía.

La declaración de calamidad pública en Valledupar subraya la vulnerabilidad de muchas zonas de Colombia ante fenómenos climáticos extremos, exacerbados por la amenaza del fenómeno de La Niña. Las medidas de cierre de balnearios y el monitoreo de áreas en riesgo resultan necesarias para evitar tragedias mayores, pero también destacan la necesidad de estrategias a largo plazo que incluyan infraestructura resiliente y programas de prevención más sólidos.
Las fuertes lluvias no solo afectan el turismo en los balnearios, sino que también representan una amenaza constante para las comunidades ubicadas en áreas propensas a inundaciones y deslizamientos de tierra.
La situación en Valledupar debería servir como llamado de atención para otras localidades vulnerables, recordando la importancia de la planificación preventiva y la inversión en sistemas de gestión de riesgos. Las autoridades enfrentan el desafío de responder adecuadamente a la emergencia inmediata mientras preparan un esquema sostenible de mitigación de riesgos para el futuro.
Y.A.