Melanny Villa Bastidas, estudiante del colegio María Inmaculada, se convirtió en el orgullo de su institución al obtener uno de los puntajes más altos en las pruebas Saber 11 del Atlántico, lamentablemente perdió la vida sin poder conocer el logro que hoy honra su memoria.
Por: Redacción Web.
Diario La Libertad.
La Institución Educativa Distrital María Inmaculada (CODIMI) de Barranquilla atraviesa un momento de mezcla entre orgullo y profundo dolor. Los resultados de las pruebas Saber 11 recientemente publicados han dejado claro el impacto de una de sus estudiantes más destacadas: Melanny Villa Bastidas.
Con un puntaje sobresaliente de 421 puntos, Melanny no solo se consagró como la mejor estudiante de su colegio, sino también como una de las más sobresalientes en el departamento del Atlántico, alcanzando el puesto 12 a nivel distrital y el 14 en el ámbito departamental.
Sin embargo, este logro quedó desconocido para Melanny, quien falleció el 23 de octubre, apenas unos días antes de la publicación de los resultados. Su partida deja una profunda huella en la comunidad educativa y en su familia, especialmente a su hermana gemela, Estefany Villa Bastidas, quienes la recordarán siempre como una joven brillante, comprometida y con sueños que se quedaron sin cumplir.
Melanny Villa Bastidas soñaba con estudiar ingeniería mecánica, una meta que impulsó con una disciplina y dedicación que la caracterizaban. Su entrega en cada reto académico y su capacidad de liderazgo la hicieron destacar entre sus compañeros, quienes hoy la recuerdan con cariño y respeto. Su esfuerzo, simbolizado en su sobresaliente desempeño en las pruebas Saber 11, representa su último gran legado y un ejemplo inspirador para los estudiantes que la conocieron y admiraron.
El colegio María Inmaculada, conocido también como CODIMI, celebró este año sus 60 años de existencia, y este aniversario especial quedará marcado por el recuerdo de una estudiante que en vida mostró un gran potencial y dejó una impronta que seguirá inspirando a futuras generaciones. En redes sociales, el colegio le dedicó un emotivo mensaje de despedida: “De aquí hasta el cielo”, como un testimonio de respeto y admiración hacia Melanny, quien sigue siendo un modelo a seguir para todos en la institución.
A pesar del dolor que deja su pérdida, los profesores y compañeros de Melanny se sienten agradecidos por haber compartido su vida y aprendido de su pasión y compromiso. En cada rincón de la escuela se siente su ausencia, pero su historia y sus logros serán recordados como una motivación para quienes persiguen sus sueños con la misma intensidad y esfuerzo.
Y.A.
