El presidente Gustavo Petro condecoró este martes en una misma ceremonia a militares, policías y exguerrilleros, una decisión que cree que puede ser muy criticada, pero es un «un ejemplo de paz y no de guerra».
«Antaño no era posible, antaño era una guerra de verdad, y hoy es posible hombro a hombro, en la misma función, cuidar la democracia, cuidar los derechos y cuidar la libertad», dijo el jefe de Estado durante la ceremonia en la que fueron condecorados varios exguerrilleros del M-19, que hacen parte de los cuerpos de escoltas que cuidan al presidente, y otros funcionarios estatales.
En su juventud, Petro fue militante de la guerrilla del M-19 e incluso en un acto de Gobierno pidió izar la bandera de ese movimiento guerrillero.
El M-19 protagonizó el 6 y 7 de noviembre de 1985 la violenta toma guerrillera del Palacio de Justicia, en pleno centro de Bogotá, para hacer un juicio político al entonces presidente colombiano, Belisario Betancur, uno de los episodios más graves del conflicto armado del país.
Tras la firma de la paz, en 1990, el M-19 se convirtió en el partido político Alianza Democrática M-19 con el cual entró en la política, lo que 32 años después permitió la llegada de Petro a la Presidencia.
«Excombatientes del M-19, que se condecoran al lado de oficiales del ejército, de oficiales de la policía, de las diferentes armas. Y eso es un ejemplo, puede ser muy criticado -obviamente desde otros puntos de vista- pero es un ejemplo porque es un ejemplo de paz, no de guerra», expresó Petro hoy en la ceremonia de la Casa Militar.