En Cauca: Liberan adolescente indígena reclutada por disidencias de las Farc

Una adolescente de 15 años, reclutada de manera forzada por disidencias del Estado Mayor Central (EMC) de las antiguas FARC, fue liberada este sábado en el convulso departamento del Cauca.

La liberación se realizó en un acto humanitario en el que participaron representantes del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF), una comisión de la ONU, y su padre, quienes la recibieron para iniciar el proceso de restablecimiento de sus derechos.

La defensora del pueblo, Iris Marín, informó que la menor fue entregada por el grupo Dagoberto Ramos, una facción disidente de las antiguas FARC. «La adolescente fue oficialmente entregada al ICBF en Popayán, con la presencia de su padre, para que se inicien los procedimientos necesarios para garantizar su protección como víctima del conflicto armado», detalló Marín.

Esta liberación se suma a la de otras dos menores de edad, realizadas por el mismo grupo el pasado 25 de octubre, y evidencia la reciente intención del grupo de dejar en libertad a otros menores que deseen abandonar sus filas.

En el departamento del Cauca, donde persisten fuertes tensiones y enfrentamientos, el Ejército ha retomado este año las operaciones contra las disidencias de las FARC, lideradas por alias ‘Iván Mordisco’.

Este grupo ha intensificado sus ataques en la región, afectando tanto a las fuerzas de seguridad como a la población civil, y ha dejado a un lado los acuerdos de cese al fuego y las negociaciones de paz con el Gobierno.

Según datos recientes de la Defensoría del Pueblo, al menos 190 niños y adolescentes, principalmente de comunidades indígenas como los nasa, han sido reclutados a la fuerza por grupos armados ilegales entre enero y agosto de 2024. No obstante, la Defensoría ha advertido que esta cifra podría ser aún mayor, debido al temor de muchas familias a denunciar por el riesgo que implica en áreas con alta presencia de grupos armados y narcotraficantes.

Las autoridades han exhortado a las comunidades a informar cualquier caso de reclutamiento y a acudir a las instituciones de apoyo para proteger a los menores de los efectos de este conflicto. La liberación de la menor de 15 años representa un avance significativo en la lucha contra el reclutamiento forzado de niños en el país, un fenómeno que sigue afectando a las poblaciones más vulnerables.