[EDITORIAL] Mensaje de un buen barranquillero

En este espacio editorial hemos sido críticos permanentes tanto de la falta de compromiso de muchos ciudadanos porque en la construcción de cultura ciudadana todo lo hecho es válido, pero al mismo tiempo es mucho lo que hace falta; es una dinámica que debe imponerse con la participación de una ciudadanía con sentido de pertenencia como buenos barranquilleros, tolerantes, capaz de concertar, de cumplir acuerdos y que respete las normas legales por su propia voluntad, no por imposición. En el pasado, los barranquilleros siempre nos mostramos muy orgullosos de nuestro civismo, pero en la realidad de este solo queda la sombra. Es urgente que recuperemos el cumplimiento de las normas mínimas de convivencia, que buscan lograr que la ciudad sea más amable para todos. Solo se requiere un mínimo esfuerzo y que las autoridades las ayuden a fomentar con campañas masivas y que nos comprometamos a ser cada día mejores ciudadanos. Muchos barranquilleros hacen caso a las más elementales normas de civismo, que aplicándolas pueden mejorar la seguridad; definitivamente necesitamos una mejor cultura ciudadana y un mayor sentido de pertenencia, cuya iniciativa debe surgir de cada uno. Esa falta de compromiso la apreciamos diariamente en las calles en variadas presentaciones, por ejemplo, violar las señales de tránsito es una forma de agredir a la ciudad, lo mismo que invadir los espacios públicos, irrespetar a los peatones y una larga lista de lo que algunos hijos de Barranquilla hacen contra la ciudad, cuyos habitantes se apartan de lo que es bueno para vivir en comunidad. Debería ser una decisión personal dejar de atentar contra el entorno, comportarse como corresponde a un buen ciudadano, es que no se necesita mucho esfuerzo para hacerlo, lo contrario es una ofensa para nuestra ciudad. Así mismo es deber de los adultos dar buen ejemplo para que los menores imiten lo que realmente es bueno y es en la casa donde se adquieren los buenos hábitos. Hay que observar cómo muchas de las respuestas que se reclaman de las autoridades ya sean del orden distrital o departamental, están a cargo de la misma comunidad, lamentablemente esta no siempre cumple lo que le corresponde. En la medida en que seamos partícipes de buenas acciones comunitarias, será más sencillo reclamar de las autoridades el cumplimiento de sus obligaciones.