La Comisión de Regulación de Energía y Gas (CREG) ha anunciado una serie de medidas regulatorias que buscan reducir significativamente el costo de la energía eléctrica en la región Caribe. Se estima que el precio del kilovatio/hora podría descender a aproximadamente 800 pesos entre enero y marzo de 2025. Este cambio es una respuesta a la alta carga tarifaria que actualmente afecta a los usuarios de esta zona del país, donde los precios oscilan entre $1200 y $1070 para el sector residencial.
Durante una audiencia pública celebrada en Montería, los funcionarios de la CREG explicaron que la intervención abarcará diversos componentes del costo energético, incluidos generación, transmisión, distribución y comercialización. Entre las acciones ya implementadas se destaca el control del precio en la bolsa energética y la introducción de un nuevo sistema de indexadores que moderará el crecimiento del costo de generación.
La decisión de intervenir en las tarifas es resultado de un fallo del Tribunal que ordenó revisar los precios en la región, a raíz de una demanda interpuesta por representantes de la comunidad. Esta medida se alinea con las directrices del gobierno nacional para regular los costos energéticos en el Caribe.
Actualmente, la región opera bajo un régimen regulatorio transitorio, establecido para facilitar el funcionamiento de las empresas Air-e y Afinia. Sin embargo, se prevé que este régimen sea modificado en los próximos meses para armonizar las tarifas con las del resto del país.
Fanny Guerrero Maya, comisionada de la CREG, expresó su esperanza de que estas medidas avancen en su tramitación legal entre enero y febrero, con el objetivo de que estén efectivas en marzo. Guerrero enfatizó que estas intervenciones son parte de un proceso de revisión más amplio del modelo regulatorio de tarifas en la Costa, que se llevará a cabo durante el año 2025, con el fin de establecer un sistema más eficiente que considere las particularidades del mercado caribeño.
Con estas acciones, la CREG busca garantizar un suministro de energía más accesible y sostenible para los habitantes de la región Caribe, al tiempo que se potencia el potencial energético de esta zona del país