La Fiscalía General de la Nación asegura que las pruebas forenses desmienten la versión del sospechoso y revelan un caso de violencia extrema.
La Fiscalía General de la Nación anunció la captura y aseguramiento en centro carcelario de un hombre señalado de abusar sexualmente, torturar y causar la muerte de un niño de tan solo dos años y ocho meses en San Cayetano, Cundinamarca. Este crimen ha sacudido a la comunidad y al país entero, mientras las autoridades siguen investigando para que se haga justicia por la pequeña víctima.
El caso tuvo su inicio el 18 de octubre, cuando un familiar reportó la desaparición del menor. Tras una intensa búsqueda, el cuerpo del niño fue encontrado dos días después en la vereda Los Ríos, en el mismo municipio. El presunto agresor intentó desviar la investigación al asegurar que la muerte había sido un accidente, afirmando que “el niño cayó de un caballo que le pasó varias veces por encima”. Sin embargo, las autoridades desestimaron esta versión gracias a los resultados de la investigación forense.
La colaboración entre la Fiscalía General de la Nación, la Policía Nacional y el Instituto Nacional de Medicina Legal fue fundamental para esclarecer los detalles del crimen. Tras un exhaustivo análisis, las pruebas revelaron que el menor fue sometido a actos de tortura y abuso sexual, los cuales finalmente provocaron su muerte. Estas evidencias vinculan de manera directa al capturado con el macabro suceso.
El sospechoso fue detenido en el municipio de El Colegio, Cundinamarca, y presentado ante una juez de control de garantías. La Fiscalía le imputó cargos por homicidio, tortura y acceso carnal violento con menor de 14 años, todas agravadas por las circunstancias de los hechos. A pesar de la contundencia de las pruebas, el acusado no aceptó los cargos y se le impuso una medida de aseguramiento en prisión mientras avanza el proceso judicial.
El caso ha sido seguido de cerca por las autoridades, quienes rápidamente desestimaron la coartada del procesado al verificar que las lesiones presentadas en el cuerpo del menor no se corresponden con un accidente. Los análisis realizados por peritos de Medicina Legal determinaron que el niño sufrió golpes severos y abuso sexual, lo cual causó su trágica muerte.
Este crimen reabre el debate en Colombia sobre la protección de los menores y el fortalecimiento de la justicia para evitar que casos como este se repitan. La Fiscalía ha reiterado su compromiso de avanzar en el proceso judicial con todas las herramientas legales a su alcance, buscando una condena ejemplar que haga justicia y envíe un mensaje claro sobre la intolerancia hacia la violencia contra los menores.