Adrenocromo: Mitos y realidades de una supuesta droga rejuvenecedora

El auge de la película ‘Sound of Freedom’, protagonizada por Jim Caviezel, ha revitalizado el interés por el movimiento QAnon y las teorías conspirativas asociadas con él. Desde su aparición en el foro online 4Chan en 2017, este movimiento ha propagado la idea de que existe una guerra secreta contra pedófilos y adoradores del diablo infiltrados en el gobierno, las empresas y los medios de comunicación. Entre los conceptos más mencionados se encuentra el adrenocromo, una sustancia que, según los adherentes de QAnon, se extrae de la sangre de niños y promete mantener la juventud.

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De acuerdo con un análisis de la agencia Reuters, el adrenocromo es una sustancia roja resultante de la oxidación de la epinefrina, conocida comúnmente como adrenalina. No es un compuesto exclusivo del cuerpo humano y puede adquirirse a través de proveedores de productos químicos con fines de investigación. A pesar de esto, los seguidores de QAnon sostienen que «las élites globales» lo cosechan de niños, consumiéndolo para mantenerse sanos y jóvenes.

La discusión sobre esta supuesta droga ha resurgido debido a unas declaraciones de Caviezel en una entrevista con Steve Bannon, exasesor de Donald Trump. Durante la conversación, el actor afirmó que existe un «imperio del adrenocromo» en los Estados Unidos, donde se comercia y utiliza la sangre de los niños para extraer un compuesto químico que funciona como una «droga élite», afirmando que es «10 veces más potente que la heroína» y que hace que quienes la consumen se vean «más jóvenes».

Sin embargo, el medio Factchequeado, dedicado a verificar la veracidad de información en medios y redes sociales, ha señalado que estas afirmaciones sobre el adrenocromo son completamente falsas. Esta misma conclusión ha sido respaldada por varios medios de comunicación, incluidos The Washington Post, EFE, Reuters y la Oficina para la Ciencia y Sociedad de la Universidad McGill en Canadá.

Aunque el adrenocromo existe, más allá de sus menciones en la literatura —donde fue popularizado por el autor Hunter Thompson en su obra— no tiene las propiedades alucinógenas que algunos atribuyen a él. En su novela, Thompson incorporó el término, que luego fue referenciado en la película de 1998, además de protagonizar una película de 2017, «Adrenochrome», que retrata a un veterano estadounidense enfrentándose a psicópatas que buscan extraer el compuesto de sus víctimas.

Joe Schwarcz, director de la Oficina McGill para la Ciencia y la Sociedad, enfatiza que el adrenocromo no tiene efectos rejuvenecedores y que sus propiedades psicodélicas son muy cuestionables. De hecho, Ryan Marino, toxicólogo de los Hospitales Universitarios del Cleveland Medical Center, calificó esta teoría de conspiración como una «leyenda urbana» y afirmó que, según los estudios realizados, no tiene uso médico ni evidencia de propiedades psicodélicas o rejuvenecedoras.

Es importante mencionar que Jim Caviezel ha sido vinculado anteriormente con el movimiento QAnon, dado sus comentarios en entrevistas, charlas y redes sociales. Esto ha llevado a que la película ‘Sound of Freedom’ sea objeto de críticas y especulaciones, pues su trama gira en torno a un agente federal estadounidense, interpretado por Caviezel, que decide abandonar su trabajo para dedicar su vida a rescatar a niños víctimas de tráfico humano alrededor del mundo.

En conclusión, el adrenocromo es un concepto que ha tomado vida dentro de un contexto de teorías conspirativas que, a menudo, se alimentan del miedo y la desinformación. A medida que más personas son expuestas a estas ideas, es crucial fomentar el pensamiento crítico y la verificación de la información. La creencia en sustancias milagrosas como el adrenocromo no solo perpetúa mitos dañinos, sino que también desvía la atención de problemas reales que requieren atención urgente, como el tráfico de personas y la explotación infantil.