La Fundación Paz y Reconciliación (Pares) ha presentado un informe en la COP16 que indica una notable disminución en los homicidios de defensores ambientales en el país. Tras el alarmante registro de 81 asesinatos en 2023, el informe revela que entre enero y agosto de 2024 se han contabilizado solo 20 homicidios, lo que representa una caída significativa en comparación con el mismo periodo del año anterior.
Francisco Daza, coordinador de la línea de Paz Territorial y Derechos Humanos de Pares, destacó la necesidad de abordar esta problemática en la cumbre de Naciones Unidas sobre Biodiversidad, que se lleva a cabo en Cali hasta el 1 de noviembre. Daza subrayó que la reducción de estos crímenes debe ser motivo de discusión, dado el contexto de violencia que enfrentan los defensores de la naturaleza en el país.
El informe también resalta que los departamentos más afectados por la violencia son Cauca, Nariño y Antioquia. En Cauca, la fuerte presencia del Estado Mayor Central de las FARC ha contribuido a la alta tasa de homicidios, con 114 casos registrados desde 2018, representando casi el 32 % del total.
Sin embargo, la impunidad sigue siendo un problema grave. De los 361 homicidios de líderes ambientales documentados desde 2018 hasta agosto de 2024, un alarmante 241 no cuentan con información disponible, y muchos casos permanecen sin respuesta judicial. Pares enfatiza que la investigación efectiva de estos crímenes es esencial para proteger a quienes defienden los derechos humanos y el medio ambiente.
Adicionalmente, el informe revela que el 37 % de los defensores asesinados eran líderes indígenas, un grupo especialmente vulnerable en las regiones de Cauca y Nariño. Las disidencias de las FARC son responsables de más de la mitad de los homicidios, lo que evidencia la compleja situación que enfrenta el país en la defensa de la naturaleza.
La COP16 se convierte en un espacio crucial para abordar estos temas y comprometer a los países a mejorar la protección de los defensores ambientales y a tomar acciones concretas contra la pérdida de recursos naturales. La defensa del medio ambiente en Colombia sigue siendo una tarea peligrosa, y el informe de Pares resalta la urgencia de garantizar la seguridad de aquellos que luchan por protegerlo.











