En un esfuerzo por mitigar la creciente tensión entre el gobierno y el sector minero, la Defensoría del Pueblo ha solicitado la reanudación inmediata de los diálogos con los líderes de este sector, justo en el momento en que se anuncia un paro nacional para hoy.
Iris Marín Ortiz, Defensora del Pueblo, enfatizó que es fundamental encontrar soluciones a las preocupaciones manifestadas por las comunidades mineras, que han expresado sentir que sus solicitudes han sido desatendidas. “No es necesario llegar a un nuevo paro para resolver las inquietudes planteadas”, declaró Marín.
Durante las últimas semanas, la Defensoría ha estado en contacto con líderes mineros de diversas regiones, como el Bajo Cauca, el norte de Córdoba y el nordeste antioqueño. Según Marín, estas comunidades han planteado demandas relacionadas con la delimitación de páramos y la formalización de la actividad minera, pero consideran que el gobierno no ha respondido adecuadamente a sus requerimientos.
La Defensora también destacó la importancia de agotar todas las vías de diálogo antes de recurrir a la protesta social, que es un derecho legítimo de los sectores afectados. “El gobierno nacional ha manifestado su disposición para continuar las conversaciones y alcanzar acuerdos que eviten la movilización”, agregó.
Si el paro se concreta, la Defensoría ha comprometido su acompañamiento para garantizar el respeto a los derechos humanos de quienes participen en las manifestaciones. Marín hizo hincapié en la necesidad de establecer una mesa de diálogo que permita resolver los conflictos de manera efectiva y oportuna.
La situación actual refleja la urgencia de un acercamiento entre el gobierno y el sector minero, que enfrenta un clima de creciente descontento. La Defensoría del Pueblo se posiciona como mediadora en este proceso, buscando fomentar un ambiente de entendimiento y cooperación que beneficie a todas las partes involucradas.
