Durante una reciente mesa redonda en Las Vegas, el expresidente Donald Trump afirmó que la inmigración irregular está robando empleos a los hispanos en Estados Unidos.
En sus declaraciones, Trump responsabilizó de esta situación a la actual administración, mencionando específicamente a Kamala Harris y Joe Biden.
El evento contó con la presencia de varios empresarios y trabajadores hispanos, quienes elogiaron las políticas económicas de Trump durante su mandato (2017-2021). Según datos del Departamento de Trabajo, los inmigrantes, especialmente aquellos sin permiso de trabajo, tienden a ocupar puestos en sectores que los nativos suelen evitar, como la construcción y la agricultura.
Un estudio del economista Giovanni Peri sugiere que, en ocasiones, la llegada de inmigrantes puede beneficiar a los trabajadores locales, como se evidenció con los refugiados cubanos en Miami en los años 80, quienes contribuyeron a un aumento en los salarios de los trabajadores afroamericanos e hispanos.
Trump también destacó su supuesta popularidad entre la comunidad afroamericana y latina, afirmando que su apoyo ha alcanzado niveles históricos, a pesar de las encuestas que muestran una disminución del respaldo a los demócratas entre estos grupos en las elecciones recientes.
