La Asamblea Nacional de Venezuela, controlada por el chavismo, aprobó un acuerdo instando al Gobierno de España a abolir la monarquía, a la que califica como un símbolo de corrupción y de ultraderecha. Durante la sesión, el presidente de la Asamblea, Jorge Rodríguez, expresó que la monarquía de los Borbones no ha contribuido en nada positivo al país.
Rodríguez criticó la herencia monárquica, afirmando que es inaceptable en el siglo XXI que el poder se transmita por «derechos de sangre». Además, el Parlamento venezolano consideró la posibilidad de declarar la independencia de Cataluña y el País Vasco en respuesta al apoyo de España a Edmundo González Urrutia, reconocido como presidente electo de Venezuela por el Congreso español.
En otro acuerdo, la Asamblea instó al Gobierno de Nicolás Maduro a romper relaciones diplomáticas y comerciales con España, en respuesta al reconocimiento de González Urrutia. El documento también rechazó la resolución del Congreso español, exigiendo respeto por la decisión soberana del pueblo venezolano que eligió a Nicolás Maduro como presidente reelecto.
Esta situación refleja la creciente tensión entre Caracas y Madrid, marcando un nuevo capítulo en las relaciones bilaterales entre ambos países