
El descubrimiento de importantes reservas de gas natural en el pozo Sirius, anteriormente conocido como Uchuva, ubicado en aguas del Caribe colombiano, representa un avance significativo para la autosuficiencia energética del país.
Este hallazgo garantiza entre 12 y 15 años más de suministro de gas natural, sin embargo, el desarrollo de estas reservas requerirá tiempo, y se prevé que Colombia seguirá dependiendo de importaciones de gas durante al menos cinco años adicionales.
Felipe Roa, presidente de Ecopetrol, destacó que, aunque la nueva reserva añade un alivio a largo plazo, los colombianos continuarán dependiendo del gas importado en el corto y mediano plazo. “Se necesita entrar en todo el proceso de desarrollo y maduración de esas reservas. Una vez tengamos la licencia ambiental, se requieren otros tres años más para que esa molécula entre al sistema y llegue a los usuarios”, explicó Roa.
Actualmente, las reservas de gas de Colombia están estimadas en 2,3 terapies cúbicos, suficientes para unos 6,1 años más de suministro. Con la incorporación de los 4,5 terapies cúbicos descubiertos en el Caribe, la proyección de autosuficiencia se extiende a 15 años, lo que representa un respiro para el sector energético.
Sin embargo, Roa advirtió sobre la necesidad de mantener la vigilancia en el suministro, ya que se prevé que, en los próximos cinco años, Colombia necesitará continuar importando gas para cubrir un déficit proyectado de 161 millones de pies cúbicos para 2024. Desde 2017, el país ha estado importando gas, especialmente en momentos críticos para el sistema eléctrico, como ocurrió en marzo y abril de este año, cuando se importaron hasta 450 millones de pies cúbicos al día, cubriendo cerca del 45% de la demanda nacional.
El presidente de Ecopetrol también señaló que, aunque la importación de gas natural licuado satisface las necesidades inmediatas, su costo es significativamente mayor. Este incremento en el precio se trasladará inevitablemente a los usuarios finales, quienes podrían ver un aumento en sus facturas de gas en los próximos años.
Para asegurar el futuro energético, Ecopetrol está explorando otros yacimientos, incluyendo el bloque Komodo 1 en colaboración con Oxy y varios bloques junto a Shell. Estas actividades buscan sumar entre 10 y 15 terapies cúbicos adicionales al sistema.
A pesar de los avances, Roa enfatizó que el desarrollo de estos proyectos es un proceso largo. “Desde que se obtiene la licencia ambiental hasta que el gas puede ser comercializado, pueden pasar entre cinco y siete años”, afirmó. La empresa está trabajando para optimizar este proceso, pero reconoce que las inversiones significativas y el tiempo son factores inevitables.
En conclusión, aunque las nuevas reservas de gas natural parecen asegurar la autosuficiencia en el mediano y largo plazo, Colombia deberá enfrentar un panorama donde la importación seguirá siendo crucial, lo que representa un desafío logístico y un posible impacto en los costos del servicio para los consumidores.