Viviane Lira Monte, de 24 años, muere en Sobral tras someterse a seis procedimientos quirúrgicos al mismo tiempo, desatando una investigación por presunta negligencia médica.
Viviane Lira Monte, una empresaria de tan solo 24 años, perdió la vida de manera repentina tras someterse a seis cirugías plásticas en una sola intervención, realizada en la ciudad de Sobral, Brasil. La joven, que había cumplido con una extensa búsqueda de médicos para realizarse los procedimientos, terminó falleciendo luego de complicaciones derivadas de las operaciones.
Entre las intervenciones a las que fue sometida se encuentran procedimientos en abdomen, brazos, senos, espalda y glúteos. Esta agresiva combinación de cirugías resultó en graves complicaciones que provocaron su hospitalización. Viviane fue internada en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) durante 20 días, donde finalmente perdió la vida. La causa exacta de su muerte aún no ha sido determinada, pero se sospecha de negligencia médica.
Procedimientos riesgosos
La historia de Viviane es inquietante. Según relatos de su familia, la joven fue dada de alta apenas un día después de la cirugía, lo que resultó alarmante, considerando la magnitud de los procedimientos. «El caso es investigado por la Comisaría Municipal de Sobral, unidad del PCCE encargada de esclarecer el caso», aseguró la Policía Civil en un comunicado oficial. La policía investiga las circunstancias en torno a esta «muerte sospechosa».
Ayrton Alcântara, amigo cercano de la joven, relató que Viviane se había mostrado interesada en realizarse cirugías plásticas durante algún tiempo. Estaba en búsqueda de médicos que accedieran a realizar varias intervenciones al mismo tiempo, algo que muchos especialistas le habían desaconsejado. Sin embargo, uno de los médicos accedió a llevar a cabo las cirugías de manera simultánea, hecho que resultó fatal. Según Ayrton, «este médico que encontró hacía cosas que los otros médicos dijeron que no sería posible hacer todos juntos». Viviane se sometió a una mamoplastia de reducción (reducción de senos), múltiples liposucciones en abdomen, brazos, espalda y cuello, además de un injerto de grasa en los glúteos.
Denuncias y sospechas
La familia de Viviane ha presentado una denuncia ante las autoridades competentes, exigiendo respuestas claras sobre lo que ocurrió. «Estaba interesada en someterse a una cirugía plástica y estaba buscando algunos médicos», recordó Ayrton, quien no entiende cómo fue posible que el médico decidiera realizar todos los procedimientos en una sola sesión. Renan Santiago, el esposo de la joven, también habló sobre las irregularidades del caso. Según Renan, el cirujano que lideró las operaciones «desapareció» después de la cirugía, limitándose a aparecer una sola vez en la UCI para ver a su paciente. A pesar de que el equipo médico de la unidad le había advertido sobre el estado crítico de Viviane, el cirujano insistió en que su condición era estable.
El costo total de las cirugías ascendió a 40.000 reales (aproximadamente 30 millones de pesos colombianos), lo que representaba una fuerte inversión por parte de la familia de Viviane, que hoy busca justicia. Renan Santiago, devastado por la pérdida de su esposa, mencionó que los médicos no fueron claros sobre los riesgos asociados a múltiples procedimientos simultáneos y asegura que la negligencia fue evidente desde el momento en que se permitió el alta médica un día después de la intervención.
Investigación en curso
Actualmente, la Policía Civil de Ceará sigue investigando las circunstancias que rodean la muerte de la joven. Según se informó, el médico responsable de las cirugías tiene un registro activo que lo habilita para ejercer la medicina. Sin embargo, las dudas sobre su proceder en este caso han generado preocupación en la comunidad médica y en la opinión pública.
La tragedia ha encendido el debate sobre la ética y las regulaciones en torno a la cirugía plástica en Brasil, país que ocupa uno de los primeros lugares en el mundo en la realización de este tipo de intervenciones. La muerte de Viviane, a un día de cumplir 25 años, se suma a una larga lista de casos que exigen una revisión más profunda de los procedimientos médicos y de los riesgos que conllevan cuando no se toman las debidas precauciones.