A sus 80 años, Choi Soon-hwa se ha convertido en un símbolo de empoderamiento en el ámbito del modelaje. Su decisión de participar en el certamen de Miss Universo Corea del Sur ha captado la atención internacional, especialmente tras el anuncio de la organización de eliminar las restricciones de edad para las concursantes.
Choi, nacida en 1943, ha llevado una vida rica en experiencias. Tras trabajar como enfermera y pastora cristiana, se convirtió en madre de dos hijos y abuela de tres nietos. Sin embargo, fue a los 68 años, tras su jubilación y en un momento de dificultades financieras, que decidió dar un giro a su vida al ingresar al mundo del modelaje, inspirado por un comentario de sus colegas.
Desde entonces, Choi ha cultivado una exitosa carrera, convirtiéndose en una figura reconocida en la industria de la moda en Corea del Sur. Su trabajo se ha enfocado en representar a la creciente población senior, un mercado en expansión que busca mayor visibilidad y representación.
Hoy, reside en Incheon y se ha establecido como modelo a tiempo completo, rompiendo estereotipos y redefiniendo lo que significa ser bella a cualquier edad.
Con una confianza inquebrantable, Choi se encuentra entre las semifinalistas del certamen de Miss Universo Corea, que culminará este 30 de septiembre.
En una entrevista reciente con Washington Times, compartió que, “vi muchas modelos lindas que no eran coreanas y quiero explorar y vivir aventuras en escenarios globales; siempre habrá nuevas oportunidades para internacionalizarme”.
Si Choi logra hacerse con la corona de Miss Corea, representará a su país en el evento internacional de Miss Universo 2024, que se llevará a cabo el 16 de noviembre en Ciudad de México. Su participación no solo desafía la forma en la que tradicionalmente se conocía el certamen, sino que también envía un poderoso mensaje sobre la belleza y la valía en todas las etapas de la vida.
