- Cada año se presentan entre 47 y 50 millones de casos de sepsis a nivel global. Cerca de la mitad de todos los casos estimados y registrados se producen en niños menores de 5 años.
- La sepsis es la principal causa de muerte hospitalaria en el mundo, con una cifra cercana a 11 millones de vidas perdidas al año.
- Fortalecer programas de detección y atención temprana de la sepsis en Colombia es una necesidad urgente para mejorar la supervivencia de los pacientes que padecen esta condición.
La sepsis es una peligrosa complicación que surge cuando el sistema inmunitario responde de manera descontrolada ante una infección, y que, conlleva a múltiples complicaciones incluida la muerte.
El tema es de primer orden porque, según la Organización Mundial de la Salud, la sepsis es una de las causas de muerte más frecuentes a nivel global, y según datos recopilados por este organismo de las naciones Unidas, en 2022 se registraron en el mundo 48,9 millones de casos y 11 millones de muertes relacionadas con la sepsis, cifra que equivale al 20% de todas las defunciones a escala mundial.
Ante esta alerta, muchos actores del sector salud en el mundo, han venido reaccionando desde diferentes ángulos. Según la Doctora Adriana Aristizábal, vocera de Laboratorio Vitalis, “la detección y atención temprana de esta condición es fundamental para reducir los resultados en términos de complicaciones, pues en muchos casos, los síntomas de esta son inespecíficos, la confirmación del diagnóstico es compleja y el tratamiento se retarda”.
Es aquí donde los programas hospitalarios de sepsis, también conocidos como «Código Sepsis, juegan un papel crucial, permitiendo a los médicos identificar rápidamente esta condición, actuar de manera articulada, y reaccionar con la velocidad que se requiere. Y aunque algunas instituciones hospitalarias ya aplican el protocolo del Código Sepsis, muchas otras adolecen de la formación requerida para adoptar esta metodología, aunque también hay que reconocer que Colombia da pasos decisivos para alinearse con esta tendencia mundial en defensa de la vida.
“El Código Sepsis permite la detección precoz de este síndrome, así como la aplicación temprana de medidas diagnóstico-terapéuticas. Esto incluye el tratamiento antibiótico adecuado y el soporte hemodinámico necesario para estabilizar al paciente, y aunque el protocolo es conocido por la mayoría de médicos y trabajadores de la salud, la implementación metódica de este procedimiento es crucial en los hospitales colombianos a nivel general para reducir la alta tasa de mortalidad asociada con la sepsis”, asegura la doctora Aristizábal.
Y es que la sepsis, diagnosticada, por ejemplo, en un paciente recién ingresado en una unidad de urgencias, representa una emergencia médica que exige una intervención inmediata, que de no diagnosticarse y tratarse a tiempo puede provocar daños irreversibles, fallos multiorgánicos, e incluso poner en peligro la vida del paciente en muy corto tiempo.
Los síntomas iniciales de la sepsis incluyen fiebre, frecuencia cardíaca elevada, respiración rápida, confusión, y piel húmeda o sudorosa. En los casos más graves, esta complicación puede progresar rápidamente hacia un choque séptico, en el que los órganos comienzan a fallar debido a la falta de un flujo sanguíneo adecuado.
Para la doctora Yenny Cárdenas, médico Intensivista y directora de la Unidad de Cuidados Intensivos de la Fundación Santa Fe de Bogotá, “aunque en Colombia, y en teoría, todos los trabajadores de la salud lo conocemos, en la generalidad no hemos logrado estandarizar los protocolos del Código Sepsis, que debería funcionar de manera transversal en todas las instituciones del país. Y si bien es cierto que la Fundación Santafé es un caso de éxito nacional, la verdad es que en la gran mayoría de instituciones hospitalarias en el país aún no estamos alineados para aplicar este protocolo y llevar articuladamente unos indicadores adecuados y unas metas tempranas”.
“El tema es que en Colombia aún nos falta una organización institucional que incentive este tipo de atención y esta rigurosidad que aquí no siempre se da porque usualmente hay fallas en la comunicación entre los diferentes equipos médicos que tratan a los pacientes”, concluye la doctora Cárdenas.
Y es que efectivamente, una normalización y generalización del Código Sepsis en Colombia podría contribuir a la recopilación de datos más precisos sobre la incidencia y mortalidad que esta puede causar, lo que a su vez podría impulsar políticas de salud pública más efectivas. Contar con datos confiables es esencial para desarrollar estrategias de prevención y tratamiento más eficaces», afirma la especialista de Vitalis. «Esto no solo beneficiaría a los pacientes, sino que también ayudaría a reducir los costos asociados con la atención médica de los casos graves de Sepsis».
En medio de los interesados como el Laboratorio Vitalis y la Fundación Santa Fe de Bogotá, que trabajan en busca de la implantación generalizada del Código Sepsis en Colombia, la academia también se une a esta iniciativa, liderada por la Facultad de Medicina de la Universidad de La Sabana, institución educativa que ha abierto un diplomado en el tema, el cual da pautas para la identificación temprana, el diagnóstico de la infección, el tratamiento antimicrobiano y el seguimiento adecuado de esta condición.
Aunque estos puntos de vista son un gran aporte para el avance del tema, cada vez se hace más necesaria la reglamentación y normalización del Código Sepsis por parte de las autoridades en Colombia, como una medida urgente y necesaria que puede mejorar la calidad de la atención médica y enfrentar la alta mortalidad asociada con este síndrome, silencioso pero mortal, en el país.
El Grupo Vitalis es una compañía farmacéutica, enfocada en el desarrollo y comercialización de medicamentos estériles. La organización cuenta con 7 plantas de producción en Colombia, México y Chile, certificadas en buenas prácticas de Manufactura, y hace presencia en los mercados de 20 países de Latinoamérica, Asia y África. Gracias a su permanente dinámica industrial, Vitalis viene en pleno crecimiento de su market share en inyectables genéricos en la región. En Colombia, esta compañía se destaca por su trabajo pionero en la identificación segura de medicamentos, implementada para prevenir errores durante su almacenamiento, dispensación y administración, y su presencia predominante en farmacias, con un liderazgo del 48% de participación en el mercado de inyectables.
Acerca de la doctora Adriana Aristizabal:
Directora Médica de Laborarorio Vitalis
Es médica cirujana egresada de la Universidad Nacional de Colombia y durante los últimos diez años se ha desempeñado como Directora Médica de Laboratorios Vitalis. Allí ha orientado su labor a la investigación y desarrollo de estrategias para la prevención de errores de medicación y seguridad del paciente, con foco especial en anestesia segura.
La doctora Aristizabal ha sido ponente en múltiples foros académicos en Latinoamérica en los que ha logrado generar conciencia en el sector sanitario acerca del uso adecuado de los medicamentos y su implicación en los desenlaces para pacientes y profesionales de la salud.