El exgobernador del Magdalena denuncia el deterioro de los recursos hídricos y la falta de acción frente a la conservación del planeta.
El exgobernador del Magdalena, Carlos Caicedo, ha emitido un fuerte pronunciamiento en su cuenta de X, donde expresa su preocupación por la creciente crisis ambiental que enfrenta no solo Colombia, sino el mundo entero. En sus declaraciones, Caicedo sostiene que «pese a que la naturaleza nos da contundentes evidencias, los negacionistas del Cambio Climático y un enorme grupo de poderosos capitalistas en el mundo siguen en contra vía de la conservación del planeta, sin importarles que suceda, en el mediano y largo plazo con la humanidad».
Su mensaje se hace eco de una realidad alarmante: el Río Magdalena, uno de los principales ríos del país, presenta condiciones críticas que evidencian el impacto del cambio climático y la falta de medidas adecuadas para mitigar sus efectos. Según Caicedo, hay sectores del río donde es posible atravesarlo a pie, como ocurre en los límites entre La Dorada y Puerto Salgar, específicamente bajo el puente Ferroatlántico. Esta situación resalta la urgencia de abordar los problemas ambientales con seriedad y compromiso.
La advertencia del exgobernador se enmarca en un contexto global donde los negacionistas del cambio climático continúan obstaculizando los esfuerzos para proteger los ecosistemas. Caicedo hace un llamado a la acción y la reflexión, destacando que la inacción y el desinterés de ciertos sectores podrían tener repercusiones devastadoras para las futuras generaciones.
A medida que el mundo enfrenta fenómenos climáticos extremos y la degradación de sus recursos naturales, las palabras de Caicedo invitan a cuestionar la responsabilidad de los líderes y las empresas en la crisis ambiental. La defensa del medio ambiente no solo debe ser una prioridad, sino una obligación para garantizar un futuro sostenible.
La comunidad internacional y los ciudadanos deben estar alertas y exigir un cambio en las políticas que rigen la explotación de recursos y la protección de nuestros ecosistemas. El mensaje de Caicedo es claro: no podemos permitir que los intereses económicos prevalezcan sobre la salud del planeta. El tiempo para actuar es ahora.