Homicidio frustrado en Malambo termina con una persona fallecida y otra herida

Un trágico suceso tuvo lugar en Malambo este viernes 20 de septiembre de 2024, alrededor de las 4:05 de la tarde, en la intersección de la calle 11ª5 con carrera 6 sur, en el barrio Gladiador. En lo que inicialmente se planteó como un intento de homicidio, terminó con una persona muerta y otra gravemente herida, cambiando drásticamente el destino de los implicados.

El incidente comenzó cuando Víctor José Martínez Acosta, de 24 años, junto con Alberto José Rivera Arrollo, de 57 años, intentaron llevar a cabo un asesinato. Sin embargo, su víctima no era un blanco fácil. De acuerdo con la información recabada por las autoridades, la persona que iban a atacar reaccionó rápidamente, defendiendo su vida con un arma de fuego.

En medio del enfrentamiento, Martínez Acosta recibió cuatro heridas en el abdomen, una herida en la pierna derecha y otra en la zona intercostal derecha. A pesar de haber sido trasladado con urgencia a la clínica Campbell, donde se le brindó atención médica inmediata, falleció poco después debido a la gravedad de sus lesiones. Su compañero en el intento de asesinato, Rivera Arrollo, también resultó herido, pero con una única lesión en el tobillo izquierdo. Rivera fue llevado igualmente a la clínica Campbell donde está siendo tratado, aunque su vida no corre peligro.

Los hechos, según lo manifestado por el supervisor 17, indican que tanto el occiso como el lesionado “iban a cometer un homicidio a una persona”. Sin embargo, la víctima, al darse cuenta del intento, “reaccionó con arma de fuego y les realizó los disparos, causándoles las heridas”. Tras esto, el agredido logró huir del lugar sin ser identificado hasta el momento.

Este caso deja interrogantes sobre las verdaderas razones que motivaron a Martínez Acosta y Rivera Arrollo a intentar el asesinato. ¿Se trató de una venganza personal? ¿Un ajuste de cuentas? Lo cierto es que el desenlace de este fallido intento de homicidio pone de manifiesto los riesgos que implica la criminalidad que tiene sumido al Atlántico en una ola de violencia.