Gobierno colombiano se prepara para reestructurar el Fondo de Estabilización de Combustibles antes de 2026

Ricardo Bonilla, ministro de Hacienda.

En un intento por resolver las dificultades económicas que enfrenta el Fondo de Estabilización de Precios de los Combustibles (Fepc), el Ministerio de Hacienda de Colombia, bajo la dirección de Ricardo Bonilla, ha anunciado su plan para presentar un Fepc equilibrado al siguiente gobierno.

La meta es abordar los problemas financieros estructurales que han llevado a un déficit que puede alcanzar los 10,5 billones de pesos en 2024, principalmente por el aumento en el costo del diésel.

Ricardo Bonilla, enfático en su mensaje, indicó que se considera necesario un incremento en el precio del diésel como medida crucial para disminuir el déficit acumulado. Para el próximo año, se anticipa un aumento de 800 pesos por galón, lo que se espera resulte en un ahorro de 0,4 billones de pesos, proyectando así un déficit más manejable de cinco billones para 2025.

La gestión del actual gobierno ha estado marcada por críticas debido a la pesada carga financiera heredada de la administración anterior, que dejó al Fepc sin una estrategia sólida para manejar el déficit. Aunque el Fepc no se ha contabilizado dentro del déficit fiscal oficial, Bonilla insistió en que representa una carga económica significativa para los ciudadanos.

Desde 2023, el Gobierno ha intentado evaluar y ajustar los precios de los combustibles para alinearlos con los costos internacionales, buscando eliminar la dependencia de subsidios. Sin embargo, el aumento en el precio del diésel se ha manejado con cuidado, considerando su impacto directo en el sector del transporte. Las negociaciones extensas con los gremios del transporte han permitido establecer un enfoque progresivo para que los incrementos no afecten gravemente los costos operativos.

El ajuste en el precio del diésel, que se implementará en dos fases, también se espera que incida en la inflación, proyectándose un aumento de 0,05 puntos porcentuales en los próximos meses. A pesar de que se esperaba un ahorro fiscal inicial de 1,4 billones de pesos, los ajustes cautelosos han reducido este beneficio a solo 400 millones de pesos.

Bonilla se mostró positivo sobre la posibilidad de estabilizar el Fepc para 2026, subrayando la necesidad de reformas más profundas en la política de precios. Criticó la falta de un enfoque robusto por parte de la administración anterior y aseguró que cerrar la brecha de precios es esencial para sentar las bases de una solución duradera en el futuro.

Las propuestas del actual gobierno indican un compromiso decidido a avanzar hacia una economía más estable, a pesar de los desafíos inmediatos que enfrenta el sector de combustibles y las repercusiones en la vida diaria de los colombianos.