La sede diplomática argentina en Caracas, que está siendo representada por Brasil, sigue enfrentando una grave crisis de seguridad.
Agentes del régimen de Nicolás Maduro han intensificado el asedio a la embajada, desconectando el servicio eléctrico y bloqueando todos los accesos a las instalaciones.
En el interior de la sede se encuentran actualmente en calidad de asilados diplomáticos seis miembros del equipo de campaña de María Corina Machado y Edmundo González. Esta medida de protección se ha tomado en respuesta a la creciente amenaza de ataque y hostigamiento por parte de las fuerzas del régimen venezolano.

Las autoridades brasileñas han manifestado su preocupación por la situación, calificándola como una violación grave de las normas diplomáticas y derechos internacionales. En paralelo, las negociaciones están en curso para asegurar la protección de los asilados y restablecer los servicios esenciales en la sede diplomática.
La comunidad internacional observa con atención este desarrollo, dada la delicada situación política en Venezuela y la creciente tensión entre el régimen de Maduro y los opositores. La intervención de Brasil como país representativo busca garantizar la seguridad de los diplomáticos y trabajadores en la embajada y asegurar que se respeten los principios de la diplomacia y la inmunidad diplomática.

El incidente subraya la crítica situación de los derechos humanos en Venezuela y la creciente represión política en el país. Se espera que la presión internacional y las gestiones diplomáticas conduzcan a una resolución rápida de la crisis y al restablecimiento de la normalidad en la sede diplomática argentina.